La jueza de la dana cerca a Emergencias: «No vigilaron el caudal de los barrancos y hubo ya muertos entre las 16.45 y la 17.30»
La magistrada rechaza de nuevo poner el foco en la CHJ «porque la competencia era de la conselleria» y subraya la combinación letal que supusieron los barrancos de Horteta y Gallego | Ni la Confederación ni Aemet lanzaron avisos o alertas sobre ambos cauces, los responsables de la inundación en l'Horta Sud como constata un estudio de la Universidad de Alicante que cita el juzgado
Nuevo aldabonazo de la jueza de la dana contra la Conselleria de Emergencias y contra su anterior titular, la exconsellera Salomé Pradas. En una ... nueva resolución más digna de un auto de procesamiento que de una fase de instrucción se supone que aún incipiente, un año después de la tragedia, la magistrada Nuria Ruiz Tobarra pone todo el foco de lo ocurrido en los responsables de la Generalitat al depositar sobre ellos la gestión de la emergencia y las respuestas dadas.
La titular del juzgado de instrucción número 3 de Catarroja carga contra los integrantes autonómicos del Cecopi al exponer los argumentos de un auto con el que rechaza pedir el acta y la grabación de una junta general celebrada por la Confederación Hidrográfica del Júcar un mes después de la riada. Una de las acusaciones así lo solicitaba, así conocer los participantes en la misma, por dirimir qué se habló ese día en la CHJ de la tarde de la dana.
La magistrada lo rechaza taxativamente: «No tiene relación con los hechos objeto del presente procedimiento». Y a continuación, en más de una quincena de párrafos, dice que toda la responsabilidad de lo ocurrido es de la Generalitat. «La competencia de la vigilancia de los barrancos, conforme al Plan Especial de Inundaciones de la Comunidad Valenciana, corresponde al Centro de Coordinación de Emergencias, dependiente de la Conselleria de Emergencias», señala la instructora.
La jueza subraya que, «a la vista de los interrogatorios de testigos, peritos e informes aportados», no consta «un seguimiento en la vigilancia del caudal de barrancos que debía hacerse por los directores del plan, incluido el día 29 de octubre, como estampó de su puño y letra la investigada Salomé Pradas, refiriéndose al barranco del Poyo, y como lo pone de manifiesto igualmente la movilización de los bomberos forestales y el intento de movilización, en el día 28 de octubre, de agentes medioambientales de la Conselleria de Medio Ambiente, de los que no consta que se hiciera uso el día 29 por la Conselleria de Emergencias».
Y la magistrada pone sobre la mesa la diabólica combinación que aquella tarde se produjo entre los barrancos del Poyo, Horteta y Gallego, especialmente estos dos últimos. «No consta vigilancia de caudal respecto de los barrancos tributarios del Poyo, cuyas aguas desembocaron en dicho barranco aguas abajo del caudalímetro situado en la A-3», indica la magistrada.
Sin aforos de la CHJ
El auto del juzgado elude importantes datos en su argumentario para centrar solo el foco en la conselleria. La CHJ no tenía ojos ni en la Horteta ni el Gallego, los dos grandes orígenes del desastre. No hay ningún aforo en ambas cuencas, por lo que no se pudo detectar la gran avenida que se avecinaba ni dar alerta por tanto al Cecopi. Ni un sólo mensaje de advertencia recibió en este sentido el puesto de mando. Tampoco Aemet lanzó alerta alguna sobre las abundantes precipitaciones en este punto, como Turís como epicentro. Algo que sí ocurrió por la mañana en el Magro y desató la alerta que lanzó la Generalitat, con la consellera Pradas al frente desde la mañana hablando con alcaldes y el dispositivo de Emergencias. Y todo ello con picos de 800 litros que sembraron el comienzo del fin en el dramático triángulo de Horteta-Gallego-Poyo, un punto ciego para la CHJ.
El juzgado de Catarroja habla de cuándo se produjeron las primeras muertes. Antes del arranque oficial del Cecopi a las 17 horas. «Fallecimientos producidos por ahogamiento de las aguas de barrancos afluentes del Poyo tuvieron lugar por el arrastre del agua, en Godelleta, en Turís y en Torrent, entre las 16:45 y las 17:30 horas, aproximadamente, atendiendo a las declaraciones de los perjudicados».
El origen del desastre
La jueza echa mano del 'Estudio cronológico de los volúmenes de precipitación en las subcuencas de la rambla de Poyo en el episodio del 29 octubre de 2024', publicado en julio de 2025 en la revista 'Investigaciones Geográficas', del Instituto Interuniversitario de Geografía de la Universidad de Alicante. Dicho informe analiza «la precipitación horaria» y su volumen en la rambla del Poyo y el barranco de la Saleta. Y el foco puesto en «las cabeceras de las cuatro subcuencas básicas: Grande, Chiva, Horteta y Gallego».
El informe señala cómo entre las 7 y las 9 ya había precipitaciones cercanas a 50mm. A partir de las 9 «se superan valores de 2 hectómetros cúbicos» en Grande y Chiva. Así se pasa tres horas lloviendo. En conjunto, durante ese tiempo se registran 24 hm3 en el Poyo, como señala el estudio. La lluvia para entre las 12 y las tres de la tarde.
Y después, como recoge el informe citado por la jueza, llegó el diluvio y el desastre. «Es a partir de las 17 horas, hasta las 20 horas, cuando se producen los máximos aportes pluviométricos. En estas tres horas, la subcuenca de Horteta recibe 20,7 hm3. La siguiente subcuenca en importancia es la de Gallego, con 18,3 hm3, seguida de la de Poyo medio, con 14,4 hm3».
Y el estudio que recoge el juzgado deja claro que el mayor 'monstruo' de aquel día no fue el ya tristemente famoso barranco del Poyo. «La hipótesis más probable, según concluye dicho informe, es que la escorrentía que llegó primero a l'Horta Sud fue la generada en la subcuenca del barranco de l'Horteta, con la aportación de Gallego y de la parte baja de la cuenca de Poyo».
Una combinación letal de Horteta y Gallego que deja claro otro de los párrafos de la resolución judicial: «Lo que seguro no ocurrió en la riada catastrófica de la tarde del 29 de octubre de 2024 en el abanico aluvial de la rambla en l'Horta Sud es que la responsabilidad principal fuera de las cabeceras de Poyo, que tuvieron unos aportes más tardíos y más alejados del punto apical de este abanico».
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión