Samuel Lino despeja balones sobre su futuro
El extremo brasileño confía en la reacción del equipo de cara al partido contra el Barça, para el que ya está listo Castillejo mientras Comert es duda
A punto de cumplir los 23 años -será en diciembre-, el brasileño Samuel Lino empieza a ser consciente de la velocidad que ha cogido su carrera profesional. En apenas unos meses ha pasado de ser jugador del Gil Vicente a ser traspasado por 6,5 millones (el club portugués se reserva un 20%) al Atlético de Madrid con un contrato de cinco años, y de ahí a ser el tercer futbolista que más minutos lleva acumulados en el Valencia, con quien ha conseguido su cota más alta de valor en el mercado. En mayo su cotización estaba cifrada en 7 millones y cuatro meses después se ha elevado a 12 millones. Por eso es por lo que el Valencia estaría encantado de continuar un año más con Lino -el sueño sería tenerlo en propiedad-, pero la hora de negociar todavía está lejos, tanto para los clubes como para el propio interesado.
Por eso este martes, cuando a Lino se le preguntó sobre esta cuestión, el futbolista echó balones fuera. «Quiero jugar en el Valencia hasta final de temporada, nadie del club ha hablado conmigo sobre esto, la temporada empezó hace poco. Del futuro hablamos después. Son dos grandes clubes pero estoy enfocado en el presente. Tengo contrato en el Atlético, pero estoy en Valencia y mi corazón está en Valencia. Del Atlético pensaremos después, no sé qué va a pasar, quiero estar en Valencia concentrado y hacer una buena temporada».
Esa pretensión de hacer un buen año, desde el punto de vista colectivo, pasa ineludiblemente por mejorar el rendimiento que el Valencia ha ofrecido en los últimos tres encuentros. Descarta Lino que se esté atravesando por un bache pero preguntado por los motivos que llevan a esa desconexión general en las segundas partes, indica que sobre todo es una cuestión física: «Yo me siento bien pero quizás otros no. Cada jugador tiene una forma física diferente, pero influye también el aspecto mental».
Gattuso ha conseguido que en el vestuario se practique de puertas para afuera su misma filosofía. Habló el italiano de conseguir los 40 puntos lo antes posible y Lino repite fielmente el discurso: «En el vestuario hablamos como el míster, el objetivo es hacer los 40 puntos lo más rápido y después veremos lo que hacemos».
Lo más inmediato es la cita de este sábado contra el Barcelona, un rival a tener muy en cuenta. «No estamos en un momento delicado, dos empates y una derrota, pero entraremos en el partido pensando en ganar. El Barcelona uno de los mejores equipos del mundo, también aquí hay buenos jugadores. Va a ser un gran partido».
Si Lino actuará por la izquierda, por la derecha puede jugar este sábado Samu Castillejo, que ya es uno más del grupo. El extremo se ha perdido los últimos cuatro encuentros de Liga pero para cuenta con todos los pronunciamientos para volver ya al once. Si no es así, Kluivert sería la alternativa, aunque en Sevilla el técnico italiano probó de salida con Foulquier de interior y Yunus como extremo. Del que se desconoce todavía si llegará o no a entrar en la lista es Comert, que ayer tampoco se ejercitó con el resto de la plantilla.