La caída de dos palmeras por el fuerte viento evidencia el riesgo en los parques de Tavernes

Dos palmeras cayeron el fin de semana en la playa de Tavernes de la Valldigna a causa del viento sin ocasionar heridos, simplemente hubo daños materiales. No obstante, estos incidentes evidencian un riesgo, ya que en el último medio año se han desplomado en total cuatro palmeras de gran tamaño en el término municipal. Desde el Ayuntamiento se insiste en que se están realizando los tratamientos preventivos necesarios, así como los trabajos de podas.

La concejal de Servicios, Llum Sansaloni, destacó: «Hemos tenido mucha suerte si lo comparamos con los múltiples daños que se han ocasionado por toda la geografía española». Las palmeras y su seguridad son ya un problema para Tavernes. Muchos de esos árboles cuentan con decenas de años. En algunas zonas, las palmeras llegan al quinto piso de los edificios. La plaga del picudo rojo, y el paso del tiempo, ocasionan daños a los ejemplares.

En septiembre, tras la caída de una gran palmera en la travesía vallera que ocasionó importantes daños en coches estacionados, el ejecutivo taló ejemplares con riesgo. En los últimos años ha caído una decena de palmeras en la Vall y muchas más han tenido que talarse.

El fuerte temporal de viento sufrido estos días, ha vuelto a evidenciar los peligros que suponen estas palmeras que están en zonas ajardinadas de la playa, en el Passeig Colon, la travesía de Tavernes o la calle La Barca, entre otros lugares de la Vall. En la carretera, muchas palmeras tienen su centro de gravedad desplazado y el tronco, ante el viento, se zarandera exageradamente. Aunque el viento es un peligro para las palmeras, lo es más aún si va acompañado de lluvias. Los troncos y follaje son porosos y acumulan mucho peso cuando llueve. Si un árbol no está sano, tiene muchas probabilidades de precipitarse si el temporal de viento y lluvia es intenso.

En una de las palmeras que se quebró el pasado fin de semana, las hebras que forman el interior del tronco estaban en su mayoría muertas. Unas pocas conservaban savia, pero fueron insuficientes para resistir el vaivén al que estaba sometida esa palmera de la plaza Fahd Ben Abdelaziz. En esa misma explanada, en la que hay juegos infantiles, varias palmeras presentan un estado poco saludable.

Un hecho similar sucede en la travesía. El consistorio ha eliminado varias, pero aún hay árboles que tienen síntomas de padecer alguna plaga. Las ramas no tienen el color verdoso que les corresponde y los tallos tienen mucha porosidad. «He dicho a mis hijos que no pasen cerca de las palmeras y que vayan con cuidado cuando haga mucho viento», comentaba Rosa, vecina de la Avinguda de la Valldigna. El Passeig Colon es otra zona en la que existen palmeras de gran envergadura. Aquí ha habido ya caídas de chopos y palmeras.

Daños en Gandia y Oliva

En Gandia, el fuerte viento de los últimos días rompió y echó al suelo un algarrobo del Parc de Sant Pere. Los operarios del consistorio se encontraban ayer realizando las tareas de limpieza correspondientes. Asimismo, la Federació de Falles se vio obligada a suspender la Cabalgata Mayor y a aplazarla al domingo.

En Oliva, el temporal ocasionó el desprendimiento de cascotes en el Sector 5 y la caída de un cartel de publicidad, que rompió la luna trasera de un coche.