Mozart sortea la pandemia en Les Arts

‘Réquiem’, de Mozart, con la espectacular dirección escénica de Romeo Castellucci era el plato fuerte para abrir la décimo quinta temporada de Les Arts. Un montaje complejo que la pandemia ha obligado a aplazar al próximo curso. Mutilar la espectacularidad de la pieza para cumplir con las medidas de sanidad es privar al espectador de la magia de la obra. Así lo pensó Jesús Iglesias Noriega al principio de mes, mientras la situación sanitaria derivada del coronavirus se agravaba. El director artístico del coliseo valenciano reacciono a tiempo. Planteó otra ópera de Mozart, ‘Così fan tutte’, para poder alzar la temporada en el tiempo previsto. El objetivo era y es sortear la pandemia. «Un teatro es una institución dinámica y no puede parar. Es nuestra obligación seguir adelante para mantener viva la cultura y ofrecer a la ciudadanía un espacio y foros de reflexión y crítica con las máximas garantías de seguridad para público y artistas», afirmó ayer Iglesias Noriega durante la presentación de la ópera del próximo domingo.

‘Così fan tutte’ es un montaje exprés. En apenas cuatro semanas se ha levantado una ópera de la nada. En cuatro funciones se ofrecerá una versión recortada de la pieza mozartiana. Se han eliminado fragmentos musicales (un par de arias) para dejar la ópera en dos horas y media (sin pausa). «Funcionará porque el trabajo con la orquesta ha sido estupendo», aseguró el director musical Stefano Montanari.

Materializar el cambio de título inaugural en Les Artes ha sido, según Iglesias Noriega, «un ‘tour de force’». ¿Habrá más cambios en la próxima temporada? «Ante cualquier dificultad, nos adaptaremos y saldremos adelante pero tenemos que garantizar el contacto con el público, que demanda cultura», insistió el director artístico, quien avanzó que se analizará título a título de acuerdo con la situación sanitaria y los protocolos.

La incertidumbre sobre el futuro es tal que la evolución de la pandemia no garantiza sacar adelante «ni tan siquiera un plan B», enfatizó el responsable artístico. Aún así Les Arts opera con cierta previsión, por ejemplo, la orquesta trabajará con el foso extendido (algo que beneficia a la ópera ‘Fin de partie’, György Kurtág) y se baraja adaptar el coro en la puesta en escena de ‘La Cenerentola’, de Rossini.

Al ser un montaje semiescenificado, los precios de ‘Così fan tutte’ se han reducido y oscilarán entre los 10 y los 75 euros. La responsable del concepto escénico, Silvia Costa, explicó que en esta producción la música «prima por encima de todo». Ha ideado «un espacio abstracto pero que da una idea de simetría» y que dejan ver a «dos mundos distintos y paralelos sin necesidad de acudir a épocas diferentes». «Creo que trabajando juntos, tanto con Stefano como con los cantantes, hemos conseguido editar esa idea que yo quería resaltar de la soledad de los personajes y que incluso cuando interactúan siempre hay esa parte de soledad que encuentran al final», matizó.

Costa, colaboradora de Castellucci, aceptó esta propuesta de «último momento» por la llamada de Iglesias Noriega a favor de «seguir adelante» pese a esta pandemia porque «hay que apoyar a la cultura sea como sea». Pese al poco tiempo, se ha conseguido «un buen resultado» hasta el punto de que se ha logrado una calidad propia de producciones ensayadas con tiempos normales pese a que los ensayos fueron «muy rápidos, pero eficaces» y el vestuario se cerró en cuatro días.

Por su parte, el director musical de la obra, Stefano Montanari, destacó que la música y la escenografía funcionan «muy bien» gracia a que al ser un montaje «sencillo y lineal» deja libertad a los cantantes y «no hay un hilo conductor que bloquea la estructura».

‘Cosí fan tutte’, que también se representará el 30 de septiembre, 2 y 4 de octubre, cuenta con un reparto de jóvenes pero experimentados intérpretes, en el repertorio mozartiano como Federica Lombardi, Paula Murrihy, Marina Monzó, Anicio Zorzi Giustiniani, Davide Luciano y Nahuel Di Pierro.