PP y Cs rechazan la gestión de Ribó en la crisis por «falta de capacidad»

Primero hubo un minuto de silencio en memoria de las víctimas dentro de un espíritu de intento de consenso y apenas después, la confrontación habitual entre el gobierno municipal de Valencia y los tres grupos de la oposición, que acusaron al alcalde Ribó de ofrecer una respuesta «insuficiente», «falta de capacidad» y «decepcionante» para hacer frente a la crisis sanitaria que asola España.

El hemiciclo vivió un debate prácticamente monográfico sobre las consecuencias económicas y sociales del Covid-19 en la ciudad. El alcalde intervino para dar cuenta del trabajo realizado por el gobierno municipal en este campo, donde defendió que se han destinado más de diez millones de euros en intervenciones directas, aunque la portavoz del grupo popular, María José Catalá, le replicó que eso supone apenas el 1,1% del presupuesto municipal, para instarle a más ayudas a los afectados y bajada generalizada de impuestos.

La edil calificó de «insuficiente y decepcionante» la respuesta del gobierno municipal a la crisis sanitaria. Señaló que las víctimas «son personas y no un número, no son una cifra y no queremos desdibujarlos ni en curvas, ni en picos ni desescaladas».

«En cerca de 50 días de estado de alarma la pobre respuesta de Compromís y el PSPV ha sido aprobar sólo el 1,1% de un presupuesto municipal, de 1.000 millones de euros, para dar respuesta a la crisis sanitaria y ayudar al sector económico que lleva cerrado casi dos meses. Sólo lo han aprobado, porque la realidad es que apenas han llegado a los ciudadanos 2,6 millones de euros», señaló la edil.

El portavoz de Ciudadanos, Fernando Giner, exigió al alcalde Ribó «autocrítica» sobre las medidas adoptadas por el Consistorio y una planificación seria y rigurosa del post desconfinamiento. «Debe presentar unos presupuestos de reconstrucción, agilizar las licencias y revitalizar la actividad económica en Valencia». Opinó que le falta «capacidad para planificar y evaluar las medidas adoptadas. Hoy ha dedicado sólo cuatro segundos de su discurso para describir cómo salimos del túnel en la ciudad», criticó. Ciudadanos planteó un plan de reconstrucción post confinamiento para la ciudad con medidas para las familias, los autónomos y las pymes.

«El final del túnel se acerca. Pero todos tendremos que continuar con mucha precaución y respeto estricto a las normas sanitarias para evitar posibles recaídas», aseguró Ribó. Anunció propuestas de futuro para «aumentar la resiliencia frente a situaciones de emergencia, como por ejemplo el cambio climático ante el cual también somos vulnerables, avanzar en la innovación para encabezar este trabajo, y hacerlo, conjuntamente, con todos los sectores de nuestra sociedad». Defendió que «a pesar de la terrible situación que vivimos, la Comunitat ha sido una de las que menor grado de infecciones», ha tenido en esta crisis. Destacó también las ayudas a los mayores con los servicios de comida a domicilio (536 usuarios), las cestas semanales de comer (258 usuarios) y el Call Center que ha gestionado hasta ahora 2.750 llamadas desde el inicio de la crisis.

Uno de los puntos del orden del día del pleno era la aprobación definitiva del plan urbanístico de la Tabacalera, con informes favorables y que incluye la recalificación de dos parcelas para la construcción de viviendas, situadas en la zona de la avenida de Francia y que estaban destinadas a un jardín y un colegio público. Esto se hace para trasladar la edificabilidad anulada en la parte trasera de la antigua fábrica de tabacos después de una sentencia del Supremo. La asociación de vecinos de Penyaroja había previsto intervenir para mostrar su rechazo hacia esta iniciativa, al considerar que no deben perderse espacios de dotaciones públicas. El gobierno municipal argumenta que tanto el jardín como el colegio se harán.

Una de las mociones debatidas ayer fue la presentada por el grupo municipal de Vox donde pedía que se cumpliera también la obligación del confinamiento de las personas sin hogar con una adecuada oferta de plazas en albergues. La medida fue rechazada al mostrar la concejala de Servicios Sociales, Isabel Lozano, un informe del servicio jurídico municipal donde se concluye que no se puede obligar al faltar una instrucción del Ministerio del Interior.

La propuesta de Vox recibió una enmienda de adición por parte del grupo popular con el propósito de matizar algunos términos, mientras Ciudadanos no se mostró de acuerdo con la iniciativa. Sea como sea, el caso es que no salió adelante.

En el debate, el portavoz de Vox, Pepe Gosálbez, recordó las quejas vecinales en algunos barrios por la concentración de mendigos en plazas, portales y jardines, con el riesgo que supone de contagio del Covid-19. Lozano respondió que no se han dado casos de infectados entre los que se benefician de los albergues abiertos, algunos en polideportivos. Por su parte, la concejala popular María José Ferrer mostró fotografías del acceso a uno de estos recintos, en el bulevar Serrería, que mostraban una aglomeración de usuarios que vulnera todas las instrucciones del Gobierno sobre la distancia social.

En la ciudad se han abierto 391 plazas desde el pasado 14 de marzo, por lo que el total asciende a 913 al contar todos los recursos propios del Ayuntamiento o que resultan con subvenciones públicas.