El 'contrato del siglo' se reactiva en Valencia

Así lo informó esta semana la Mesa de Contratación del Ayuntamiento, después de un parón de cuatro meses por un segundo recurso interpuesto por una de las aspirantes, precisamente por la inclusión en la carrera de SAV.

Aparte de esta firma, otras cinco se han presentado para los tres lotes en los que se divide la ciudad, así como por un contrato menor que se refiere a la limpieza de pintadas y se centra en una entidad social. Para dar idea de la demora que hay en este asunto, el primer plazo de presentación de ofertas acabó el 3 de febrero del pasado año.

Como se sabe, el Ayuntamiento consideró que SAV había presentado su oferta fuera de plazo, por lo que no la admitió. Dos recursos, dictamen del Consell Jurídic Consultiu aparte, facilitaron que una de las empresas tradicionales de la ciudad volviera a la pugna por los lotes. Después llegó otro recurso de una empresa distinta que fue desestimado, levantándose la suspensión el pasado 12 de diciembre.

Cuatro ofertas se presentan a los dos lotes grandes (norte y sur de Valencia), mientras que otra se centra en el tercero, que coge los barrios del Marítimo. La sexta se refiere a la limpieza de pintadas, con un presupuesto total de cinco millones de euros.

El contrato sustituirá al vigente desde 2005 y para dar idea de la importancia que tiene, se prevé que las contratas necesitarán unos 1.500 trabajadores y unas inversiones de alrededor de 120 millones.

Las actuaciones se paralizaron después de la apertura de los sobres con los datos administrativos de las aspirantes. Ahora, se retoma con la información que puntuará con los criterios basados en los juicios de valor, es decir, las mejoras que ofrezcan respecto a los mínimos exigidos en el concurso. Quedará después lo referido a la oferta económica.

No obstante, se trata de un concurso complejo. El concejal de Ecología Urbana, el vicealcalde Sergi Campillo, avisó de que el proceso durará meses. Mientras, el Ayuntamiento paga a las contratas actuales al estar prorrogado los encargos.

Un perjuicio claro de la demora que se acumula es que lógicamente no se pueden poner en marcha las mejoras previstas en el concurso, con un parque móvil moderno, contenedores inteligentes que avisan del llenado o la renovación de depóstos. Precisamente ayer, la Entidad Metropolitana de Residuos hizo balance de la recogida en Valencia y el área metropolitana, que se quedó en 2022 en 552.000 toneladas anuales, registrándose un aumento significativo de los residuos orgánicos para reciclaje.

El pasado año se cerró con 52.168 toneladas de materia orgánica frente a las 30.506 de 2021, lo que refleja un incremento del 71,01%. El récord de recogida de los 45 municipios se sitúa en 2018 con 577.878 toneladas en total.