La geolocalización de una tablet permite detener en Picanya a una banda que robaba en chalés

Los hechos sucedieron en la madrugada del pasado sábado después de que los delincuentes sustrajeran un iPad, dinero en efectivo, la llave de un coche y un dispositivo GPS de mano tras forzar la ventana de un chalé en una urbanización de lujo en Picassent.

Los ladrones vestían ropa oscura y actuaron con mucho silencio para no despertar a las cuatro personas adultas que estaban durmiendo en la casa: un matrimonio y sus dos hijos. Registraron varios cajones y muebles, se apoderaron de los dos aparatos electrónicos y una pequeña cantidad de dinero y salieron con rapidez por el mismo sitio por donde habían entrado.

Tras saltar la valla del chalé, los delincuentes subieron a un coche donde un compinche les esperaba al volante y huyeron en dirección a Picanya. Eran las seis y media de la madrugada. Minutos después, uno de los moradores se despertó, descubrió el robo y avisó a los vigilantes de Levantina de Seguridad, la empresa encargada de la vigilancia en la urbanización. Estos acudieron con urgencia a la vivienda y avisaron a la Guardia Civil para que se hiciera cargo de la investigación.

Mientras esperaban la llegada de una patrulla de la Guardia Civil, uno de los vigilantes inició la búsqueda de la tablet tras acceder a otro dispositivo electrónico con las claves que le facilitó el propietario del aparato, y de esta forma siguió el itinerario de huida de los ladrones hasta una vivienda de Picanya.

Tras facilitar esta precisa información a la Guardia Civil y la Policía Local, el dueño de la casa y sus dos hijos se desplazaron con un coche a una planta baja situada en la calle Isaac Peral de Picanya, donde marcaba la geolocalización de la tablet, con la intención de recuperar sus pertenencias y el dinero.

Al mismo tiempo llegaron varias patrullas de la Guardia Civil y la Policía Local, que acordonaron la zona para buscar a los ladrones. Tras localizar la casa donde se encontraban los individuos sospechosos, los agentes detuvieron a cuatro argelinos como presuntos integrantes de una banda que roba en chalés con moradores dentro.

Los ladrones aún llevaban la ropa negra que suelen vestir para cometer los robos por la noche y ocultarse en la oscuridad. La Guardia Civil registró la planta baja y recuperó los dos aparatos sustraídos poco antes en el domicilio de las víctimas, así como una bicicleta y otros objetos robados ese mismo día en chalés en la comarca de l'Horta.

Los delincuentes habían envuelto el iPad con papel de aluminio en un intento de anular su geolocalización. La búsqueda inmediata de la tablet que realizó el vigilante, con las claves que le facilitó el dueño del aparato, fue decisiva para recuperar los objetos robados y detener a los presuntos ladrones.