Borrar
Urgente Bertín Osborne y Taburete, entre los artistas de los Conciertos de Viveros 2024
El forense Etxeberria y varios guardias civiles en el paraje donde enterraron a las niñas. ' EL LECTOR DE HUESOS'/ETB2
Caso de las niñas de Alcàsser (Toñi, Míriam y Desirée) | Cotejan el ADN de los huesos de la fosa de Alcàsser con el de la madre de Desirée y el padre de Míriam

Cotejan el ADN de los huesos de la fosa de Alcàsser con el de la madre de Desirée y el padre de Míriam

El Instituto de Medicina Legal toma muestras de saliva a Fernando García y Rosa Folch cuando están a punto de cumplirse 28 años del triple asesinato

Javier Martínez

Valencia

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Viernes, 18 de septiembre 2020, 01:01

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Cuando están a punto de cumplirse 28 años de los asesinatos de las niñas de Alcàsser, la incertidumbre se mantiene sobre el perfil genético de los cuatro huesos hallados por un joven en 2019 en el paraje donde aparecieron enterrados los cadáveres de las menores. El padre de Míriam y la madre de Desirée continúan esperando el resultado del cotejo de las pruebas de ADN para saber si los restos humanos pertenecen a su hijas.

Un estudio antropológico realizado por el Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses descartó que los restos óseos se hubieran desprendido del cadáver de Toñi, pero no excluyó que pudieran ser trozos de falange de las otras dos niñas. Como ya informó LAS PROVINCIAS, una vez que los biólogos lograron extraer ADN de los pequeños huesos, el Instituto de Medicina Legal de Valencia citó a Rosa Folch y Fernando García, la madre de Desirée y el padre de Míriam, para tomar sendas muestras de su saliva.

La crisis pandémica retrasó la recogida de los perfiles genéticos y su remisión al Departamento de Barcelona del Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses, donde los especialistas están realizando las pruebas de cotejo para determinar si los restos óseos pertenecen a los cadáveres de las niñas.

Noticia Relacionada

El Juzgado de Instrucción número 6 de Alzira, encargado del sumario del caso Alcàsser, autorizó la toma de muestras biológicas a Rosa Folch y Fernando García, que enviudaron pocos años después de los asesinatos, en virtud de los resultados del estudio antropológico sobre el origen y antigüedad de los huesos.

Los padres de Toñi están excluidos de estas pruebas de ADN porque al cadáver de su hija no le faltaba ningún dedo de las manos cuando los forenses realizaron las autopsias en enero de 1993. Sin embargo, los antropólogos que analizaron los trozos de falange no descartan que puedan pertenecer a Míriam y Desirée, ya que el informe que realizaron los forenses hace 28 años afirma textualmente que «faltan parte de los dedos índice, corazón, anular y meñique» de una de las menores. Los médicos y los especialistas de la Guardia Civil también constataron la existencia de mordeduras de animales en la ropa de una de las niñas, por lo que consideraron siempre la posibilidad de que alguna alimaña arrancara los trozos de falange después del enterramiento de los cuerpos.

Según el sumario del caso Alcàsser, el apicultor Gabriel Aquino encontró «una mano saliente, deshuesada prácticamente en su totalidad, con dos huesos salientes y un reloj blanco que está parado y marca las 14.30 horas». Además, las diligencias escritas de la inspección que realizó la Guardia Civil aquel fatídico 27 de enero de 1993 precisan que algunos dedos «tienen restos de carne y otros son fragmentos óseos».

Noticia Relacionada

Incredulidad de Fernando García

A pesar de estas evidencias, Fernando García cree que los trozos de falange analizados no pertenecen a su hija y que alguien los echó con «malas intenciones», según su opinión, en el paraje de Tous donde los dos apicultores descubrieron los tres cadáveres.

«Los investigadores cribaron dos veces la tierra de la fosa. La Guardia Civil lo hizo primero y el inspector de la policía Ricardo Sánchez realizó después otro reconocimiento exhaustivo por orden de Rafael Vera (secretario de Estado para la Seguridad del Gobierno de España en 1993) para no dejar cabos sueltos», asegura García. «Los huesos esos los tiró allí alguien. El motivo lo desconozco pero no me extrañaría que lo hubiesen hecho para volver a sacar el caso en las televisiones. Estoy ya bastante harto», añadió el padre de Míriam.

Noticia Relacionada

Pero el antropólogo Francisco Etxeberria no piensa lo mismo. El prestigioso forense cree posible que los trozos no fueran recogidos durante el levantamiento de los cadáveres ni al día siguiente cuando los especialistas de la Guardia Civil cribaron la tierra para buscar pruebas. Las lluvias lavaron el terreno con el paso del tiempo y el hecho de que el paraje sea un lugar recóndito y poco transitado habría favorecido que los restos óseos permanecieran tantos años sin ser descubiertos.

El 16 de febrero de 2017, Etxeberria encontró un diente también en el mismo lugar durante la grabación de un reportaje para el programa 'El Lector de Huesos' de la televisión autonómica vasca, pero el premolar estaba muy deteriorado y los biólogos no pudieron extraer ADN para cotejarlo con el de los padres de las niñas asesinadas.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios