El nuevo permiso de paternidad elevará en 48 millones el coste laboral en la Comunitat

Sin embargo, la otra cara de la moneda está en que esta situación supondrá un esfuerzo económico a las empresas, ya que seguirán pagando la cotización correspondiente a la SS del trabajador, aunque no esté prestando sus servicios. Desde la patronal valenciana CEV, su secretario general, Miguel Ángel Javaloyes, lamenta que esta decisión se haya tomado sin pasar por la mesa del diálogo social, que está abierta y debería haber debatido y consensuado una medida de este tipo. Aunque la organización apoya que se desarrollen iniciativas de corresponsabilidad y conciliación familiar, Javaloyes advierte de que no todas las mercantiles pueden asumir igual el hecho de desprenderse de un trabajador durante 16 semanas, como ya ocurre en el caso de las mujeres, y advierte del desembolso que generará para las arcas públicas el nuevo escenario.

Aunque el gasto para la administración y las empresas de una baja por paternidad depende de cada caso, tomando el coste laboral medio (20.197 euros anules, según el INE), y teniendo en cuenta el número de hombres que se acogieron a la baja por paternidad en la Comunitat en 2018 (24.950 hombres), se puede hacer una proyección. Así, sin que la empresa contrate a un sustituto para ese periodo, el gasto sería de hasta 48,14 millones de euros en 2021, permaneciendo estable el número de beneficiarios. La razón de esta situación está en que un sueldo se divide, a grandes trazos, en tres partes: el salario que recibe el trabajador, la cotización a la Seguridad Social (SS) que sale de la nómina; y la que paga la empresa, que se sitúa en trono al 31%. Por esto último, ahora se pagará por ocho semanas, 24 millones de euros; en 2020 por 12 semanas, 36,1 millones de euros y en 2021, 48,14 millones de euros.

En el caso de la contratación de un sustituto, a la empresa ya sí que se le bonificada con el 100% de su parte de la SS, tanto del interino como del trabajador de baja. Este último, seguirá cobrando su sueldo del INSS, mientras que la empresa abonará el del relevo. Siguiendo la extrapolación, el coste para las empresas será hoy de 48,14 millones; en 2020, de 72,21 millones y en 2021, los 96,28 millones. La contratación es más habitual cuanto mayor es el periodo de tiempo, pero muchas compañía optan por apretarse el cinturón ante la dificultad de hallar una persona que haga las mismas funciones de quien volverá en cosa de cuatro meses.