Sanidad no prevé ni una sola nueva plaza de óptico y los profesionales reclaman 200
«La conselleria vuelve a evidenciar una vez más su escaso interés por la salud visual de los valencianos», denuncian desde el colegio profesional
D. G.
Viernes, 8 de abril 2022, 13:11
«La Conselleria de Sanidad vuelve a evidenciar una vez más su escaso interés por la salud visual de los valencianos. De las 5.040 plazas estructurales que Ana Barceló (la titular del departamento) ha anunciado que se van a crear en el sistema sanitario público valenciano a partir del 1 de mayo, 1.613 dentro de la Atención Primaria, ninguna corresponde a ópticos-optometristas, a pesar de la saturación de las consultas de oftalmología, que dificultan el acceso de la población a este servicio básico«. Así de tajantes se muestran en el en el Colegio de Ópticos-Optometristas de la Comunitat Valenciana (COOCV) a la hora de analizar la ampliación de las plantillas sanitarias previstas por el Gobierno autonómico.
Frente a ello, un estudio elaborado por la institución colegial cifra en 200 los ópticos-optometristas «necesarios para ofrecer una atención sanitaria visual de calidad en los servicios sanitarios públicos y acabar con las abultadas listas de espera. Pedimos lo que es justo y coherente, que nos dejen hacer nuestro trabajo para mejorar la visión de la población», ha señalado Andrés Gené, presidente del COOCV.
Sin embargo, desde el año 2013, cuando se creó la figura del óptico-optometrista como personal estatutario de la Agencia Valenciana de Salud, tan sólo se han creado 8 plazas de óptico-optometrista de concurso-oposición.
En la actualidad, 30 ópticos-optometristas contratados ejercen en hospitales y centros de salud públicos de la Comunidad Valenciana, o lo que es lo mismo, uno por cada 167.000 habitantes, un número «claramente insuficiente» para la optima atención visual optométrica, alertan los profesionales. Mientras que la ratio en la sanidad privada, con 2.400 ópticos-optometristas trabajando en establecimientos de óptica y consultas de oftalmología y optometría, es de 2.100 personas por profesional.
«Los resultados avalan la labor de estos profesionales sanitarios especializados en salud visual. Como ejemplo, en la sanidad pública basta señalar que la demora media actual de la lista de espera de cirugía de cataratas, una de las más prevalentes, en los servicios de oftalmología donde hay ópticos-optometristas es de 57,55 días, mientras que en los departamentos donde no están, la espera es de 68,42 días, un 18,9% más. Una tendencia que también se observa en las demoras de las consultas», ejemplifican.
En la actualidad, el 27,6% de las derivaciones que realizan los pediatras de Atención Primaria y el 14,5% de las que realizan los médicos de familia, son al oftalmólogo, siendo un 76,4% y un 30% respectivamente de ellas por trastornos de la agudeza visual. «Estas consultas podrían ser asumidas y solucionadas por ópticos-optometristas, ofreciendo una atención de calidad a los pacientes con defectos refractivos y/o binoculares, y permitiendo al mismo tiempo una mejor atención de los pacientes que sí requieren derivación a oftalmología», explica Andrés Gené.