Una treintena de funcionarios de la cácel de Picassent, 15 días a la espera de realizarse las pruebas tras un caso de tuberculosis contagiosa entre los presos

Una treintena de trabajadores de la prisión de Picassent llevan más de dos semanas a la espera de ser citados para realizarse pruebas que descarten haber sido contagiados de tuberculosis.

En el mes de abril se detectó un caso de tuberculosis bacilífera contagiosa en un interno del centro, que fue trasladado el día 20 de ese mes al Hospital General. El interno llevaba en el centro penitenciario de Valencia desde el día 15 de febrero. A raíz de ello se inició la aplicación de los correspondientes procedimientos en materia de salud pública y de salud laboral de los trabajadores.

Dichos procedimientos suponen detectar a aquellos internos y trabajadores que más contacto han tenido con el preso infectado, para ser sometidos a los estudios necesarios para descartar que hayan sido contagiados. En el caso de los internos, a los pocos días, se comenzó a realizarles las pruebas oportunas.

Respecto a los trabajadores, se activó el protocolo descrito en el PPRL 1302 IIPP Procedimiento para los accidentes con riesgo biológico en los centros penitenciarios dependientes de la Dirección General de II.PP..

En primer lugar se identificó a aquellos que habían tenido más contacto con el paciente, y se les indicó la conveniencia de someterse a esas pruebas para descartar un posible contagio. Esta comunicación se llevó a cabo a principios del mes de mayo.

Pues bien, más de dos semanas después de la misma, por parte de la empresa contratada por la Secretaría General de II.PP. para la vigilancia de la salud de los trabajadores penitenciarios no solo es que no se les hayan realizado esas pruebas, sino que todavía no se les ha dado fecha para ello.

Esta situación está provocando una sensación de angustia, intranquilidad y preocupación entre los trabajadores afectados, y también entre sus familias, ya que ven como van pasando los días sin que ni siquiera se les realicen las pruebas que permitan descartar un contagio.

Desde el centro penitenciario se intenta contactar todos los días con los responsables de esa empresa para tratar de agilizar los plazos y las actuaciones sin que se facilite ninguna solución.

Es importante que estas pruebas se realicen cuanto antes para, en caso de que sea necesario, empezar de forma inmediata el correspondiente tratamiento.

Acciones legales por incumplimiento de funciones

Según el sindicato, se trata de un gravísimo incumplimiento de las obligaciones de la empresa adjudicataria, que no es el primero que se produce, y por tanto también de la obligación de la Administración penitenciaria de velar por la salud y la seguridad de sus trabajadores.

Esta misma empresa, tiene pendientes de realizar más de 100 reconocimientos médicos ordinarios a trabajadores penitenciarios en el centro penitenciario de Castellón II (Albocàsser).

Acaip presentó el pasado día 18 de mayo un escrito dirigido a la Subdirectora General de Recursos Humanos de II.PP. en el que se solicita que se realicen las gestiones necesarias para llevar a cabo las pruebas, bien por esta empresa o por otra, y que se pidan explicaciones de forma oficial sobre los motivos de este gravísimo incumplimiento y dejación de funciones.

Desde Acaip, en caso de que algún trabajador esté afectado, no se descartan acciones penales contra la empresa adjudicataria por su negligencia.