Los intocables de Marcelino

Marcelino no se enreda. Sabe lo que quiere. Y se lo dice a quien debe. Peter Lim ya conoce de boca del técnico sus deseos para afrontar con garantías la próxima Liga de Campeones. Cortita y al pie. Públicamente sí había dejado claro que con los actuales futbolistas la presencia en la aristocracia se complica y que ansía una plantilla corta. No quiere malas caras de jugadores que tengan que ver los partidos desde la grada. Si falta alguien por lesión o sanción, para eso está el filial. Porque canteranos hay valiosos. Ahí están Carlos Soler y Ferran Torres. El primero ha superado esta temporada los 2.000 minutos. El inquilino de la banda derecha porque en el centro tendrá que esperar. Marcelino cerró el debate con una frase. «Si está Parejo, él jugará en el centro». Punto final. Porque el capitán es la piedra angular del proyecto de Champions. El más fijo de los fijos. Y Kondogbia a su lado. De eso tampoco hay duda. El Valencia pagará 25 millones de euros al Inter de Milán para su compra. Con su inflexible 4-4-2, estos dos futbolistas tienen el puesto garantizado en el centro de la línea media. Intocables.

En las bandas estarán Carlos Soler y... ¿Gonçalo Guedes? Marcelino le expuso a Peter Lim que el mercado actual ofrece escasas opciones de tanta valía como el portugués. Le pidió un esfuerzo para volver a contar con él ya fuera cedido nuevamente o adquirido en propiedad. Lo primero está complicado porque el PSG necesita dinero para ajustar al fair play financiero y lo segundo está fastidiado porque el valor del jugador sube como la espuma y la economía valencianista es casi de guerra. Pero el entrenador conoce al futbolista y el futbolista al entrenador y al club. La línea media sería la formada por Parejo, Kondogbia, Carlos Soler y Guedes. Intocables.

Hay porteros que te dan puntos y otros que te restan. Hay grandísimos guardametas con vaselinas espectaculares que tienen un fallo por partido. En ese grupo no está Neto. El jugador de la plantilla con más minutos. Siempre seguro. Siempre cumple. De la escuela de Cañizares. Sobrio, sereno y sensato. Intocable.

Pero para facilitar la tarea a los porteros hacen falta defensas con oficio. Marcelino insistió mucho el verano pasado en contar con Gabriel Paulista. Lo conocía del Villarreal y sabía de sus facultades. El brasileño no consiguió ser un fijo indiscutible en el Arsenal y por esa rendija se coló el Valencia para atraerlo. Junto a Murillo, las menos veces, y al lado de Garay, las más, el brasileño ha demostrado que quiere estar en Europa. Y ahí también se mostrará José Luis Gayà. La renovación del lateral izquierdo de Pedreguer está al caer. Se hablaba de que podría ser uno de los traspasables para obtener liquidez porque, además, detrás de él está un siempre fiable Lato y Centelles en el filial. Pero es valenciano y valencianista y Marcelino le quiere. Gabriel Paulista y Gayà. Intocables.

Pero para obtener éxitos hay que marcar goles. Y el Valencia tiene al atacante español más en forma y que va a estar en el Mundial de Rusia. Se llama Rodrigo Moreno. El entrenador también le habló de él al magnate de Singapur. Le dejó claro que es su delantero, por delante de cualquiera, y que sólo se planteara un venta si la cifra tenía muchísimos ceros y era irrechazable. Junto a él han ido rotando Santi Mina y Zaza, con Vietto como cuarto en discordia. Rodrigo Moreno. Intocable.

Jugadores de Champions para un Valencia de Champions. Hay que vender para cuadrar cuentas pero Marcelino tiene su columna vertebral clara y rasa: Neto, Gayà, Paulista, Parejo, Kondogbia, Carlos Soler, Rodrigo y, ojalá, Guedes. Intocables.