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El conseller de Educación, Vicent Marzà, en primer plano, y el president Ximo Puig al fondo, ayer. :: irene marsilla
El Consell anuncia ayudas para libros sin pactarlo con diputaciones y ayuntamientos

El Consell anuncia ayudas para libros sin pactarlo con diputaciones y ayuntamientos

Educación quiere financiar a las familias con hasta 200 euros aportados a partes iguales entre las tres administraciones

DANIEL GUINDO

Miércoles, 2 de septiembre 2015, 00:04

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La Generalitat quiere que los libros de texto sean prácticamente gratis para el medio millón de alumnos valencianos matriculados en centros públicos o concertados de Primaria y Secundaria, pero la Administración autonómica sólo tiene previsto financiar un tercio del gasto total de este material, que ronda los 100 millones de euros. El resto del coste correrá a cargo de los distintos ayuntamientos y diputaciones de la Comunitat o, al menos, esa es la intención del president Ximo Puig.

Concretamente, según anunciaba ayer, acompañado del conseller de Educación, Vicent Marzà, el Gobierno autonómico acaba de activar un plan para que los libros de texto de los centros educativos sean gratuitos para los escolares. Según explicaron, a partir de este primer trimestre, los padres podrán que presentar en sus respectivos ayuntamientos las facturas de compra del citado material y recibirán hasta 100 euros de ayuda. Al finalizar el curso, y si los estudiantes entregan en el colegio los libros en buenas condiciones de conservación, recibirán hasta otros 100 euros más. Este material pasará a formar parte de un banco de libros del que, al curso siguiente, podrá abastecerse también de forma gratuita el alumnado que haya participado en la iniciativa durante el presente ejercicio. El objetivo es que los ejemplares puedan reutilizarse unos cuatro años.

Sin embargo, la Generalitat no tiene previsto financiar la totalidad del coste del proyecto y únicamente aportará el 33% del gasto. Según Puig, el gasto se repartirá a partes iguales entre las corporaciones municipales, provinciales y autonómica, decisión que no ha sentado nada bien a las diputaciones de Alicante y Castellón, que ya han anunciado su rechazo a participar en el programa de ayudas para los libros de texto propuesto por el president.

Atentado a la autonomía

Ambas instituciones concretaron que se oponen a la iniciativa por haber sido elaborada y anunciada sin consultarla previamente con las administraciones a las que se pretende implicar en su financiación. Consideran que, con esta actuación, Puig ha roto el diálogo con las instituciones provinciales; y resaltan que esta medida atenta contra la autonomía de los gobiernos provinciales. «La legislación deja bien claro que estas corporaciones tienen competencias propias y se debe respetar su autonomía; y lo que pretende la Generalitat es gobernar con el presupuesto de las diputaciones», denunciaron.

Desde las corporaciones de Alicante y Castellón reiteraron su disposición a colaborar y coordinar actuaciones para ayudar a paliar las carencias y mejorar la calidad de vida de los vecinos, pero también advierten que no encontrarán respaldo en estas instituciones cuando lo que pretendan es «instrumentalizarlas para pagar sus invitaciones».

Por contra, los ayuntamientos de Valencia, Alicante, Castellón y Elche, y la Diputación de Valencia sí se sumarán al plan del Consell para la gratuidad de libros de texto a todo el alumnado de educación obligatoria.

El alcalde de Valencia, Joan Ribó, subrayó que el consistorio de la capital del Turia participará económicamente en los términos que se establezcan en dicho plan, e informará a las familias de la ciudad convenientemente.

El alcalde de Alicante, Gabriel Echávarri, aseguró que se trata de un plan que demuestra el cambio de prioridades de la Generalitat con respecto al anterior ejecutivo autonómico. «Mientras el PP apostaba por la Fórmula 1 y los grandes eventos, ahora el Consell apuesta por asegurar el acceso a una educación pública y de calidad», señaló.

La alcaldesa de Castellón, Amparo Marco, apuntó que el consistorio de La Plana deberá abonar 600.000 euros, pero «en este momento hay muchas familias pasándolo muy mal y el ayuntamiento va a arrimar el hombro para evitar que las familias tengan que realizar un gasto excepcional que, en muchos casos, no pueden permitirse».

Por su parte, el alcalde de Elche, Carlos González, aplaudió el anuncio del president y opinó que se trata de «una medida muy positiva que demuestra el compromiso del Gobierno con la educación y que atiende una reivindicación histórica de la comunidad educativa».

El presidente de la Diputación de Valencia, Jorge Rodríguez, valoró la iniciativa del Consell y aseguró que «más allá de las polémicas», lo importante es el objetivo que persigue por lo que ha abogado por «arrimar todos el hombro».

Apoyo provincial

Por otra parte, y sobre la posibilidad de que algunos ayuntamientos no tengan capacidad económica para hacer frente a su parte del coste del proyecto, el president indicó que «las diputaciones les darán cobertura» e insistió en que «ninguna institución puede estar en contra de que haya libros gratis para los niños».

Por su parte, el conseller de Educación avanzó también que la idea de la Generalitat no se centra sólo en financiar parte de la compra de los libros. Los centros que opten por formas alternativas al uso de libros de texto también recibirán una ayuda directa por parte de la Administración autonómica.

Por último, la Generalitat debe perfilar otras cuestiones como, por ejemplo, decidir qué hacer con los libros que cuentan con ejercicios que los alumnos cumplimentan en el propio ejemplar y que no pueden ser reutilizables. «Tendremos que afinar hasta qué punto se utiliza este material», añadió Puig.

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