Borrar
Urgente Un incendio arrasa el histórico edificio de la Bolsa de Copenhague
Francis Montesinos, ayer, en la sala de un céntrico hotel donde atendió a la prensa. :: irene marsilla
Francis Montesinos: «Por lo menos ya no  lloro todos los días»

Francis Montesinos: «Por lo menos ya no lloro todos los días»

El modisto recuerda su detención: «Once tíos con pistola, perros, el helicóptero... ¿Pero qué he hecho yo? Menudo gasto»

A. RALLO

Miércoles, 30 de julio 2014, 23:41

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Francis Montesinos completó ayer un maratón de entrevistas. Cuando atiende a LAS PROVINCIAS, tras horas de comparecencia, sostiene que no está cansado. «De lo que estaba cansado era de no poder hablar», responde. Su exposición mediática de ayer tiene un único objetivo: limpiar su imagen tras el archivo de sus presuntos abusos a menores. La pesadilla de su imputación ha terminado. «Ya no lloro todos los días», confiesa.

Lo primero. ¿Cómo se encuentra?

Me lo habéis preguntado todos. Vosotros sois de Valencia y conocéis a los que me odian y a los que les apasiono. En mi pueblo me gritaban: «No té res a veure. És tot una calúmnia». Mire, tengo 64 años. Estoy a punto de salir de torear y ahora... ¿me hacen torear en algo que no he hecho nunca? No tiene nombre.

Pero, ahora, ¿cuál es su estado de ánimo?

Perdón. No estoy devastado después de todos los infundios y mentiras porque he visto algo de luz con el archivo. Soy inocente y la gente lo ha visto. Pero me habéis machacado. Ha sido un golpe muy bajo. Estoy roto física, psicológica, moral y económicamente.

Vayamos por partes. Psicológicamente. ¿Ha necesitado ayuda?

Pues estoy en ello. Espero recuperarme poco a poco. Hoy por hoy, por lo menos ya no lloro todos los días.

Económicamente.

Tengo que cerrar la tienda (ubicada en la calle Conde Salvatierra). Se me han caído todos los contratos y me han cancelado los bolos.

¿Cuánto dinero ha perdido por este asunto?

Si hay algo que yo no sé es sumar.

¿El cierre de la tienda de Conde Salvatierra está relacionado directamente con este asunto?

Directamente, por supuesto. Si se me cae el contrato de los trajes de comunión, si se me cae Iberflora, si me cancelan el bolo de la Universidad de Santiago... ¿Esto qué es? ¿Está relacionado o no?

Volvamos al punto de partida. ¿Cómo fue su detención por parte de la Guardia Civil y qué pensó?

Estaba sorprendido en casa y en el juzgado. No sabía qué hacía allí. Se presentaron once tíos con pistola, más el perro, más el helicóptero y su puta madre... ¿Pero qué he hecho yo? Menudo gasto. ¡Para nada! (exclama)

Todo comenzó a raíz de denuncias de personas próximas a usted. ¿Qué perseguían?

Está muy claro, era un enfrentamiento por la custodia de los menores.

Pero, ¿por qué le querían hacer daño a usted?

Si están peleándose y dices que el otro lleva a los hijos a una mala casa, pues estás en contra.

¿Se ha sentido perseguido por la Fiscalía?

Sí...(desliza) Aunque yo no entiendo mucho. Pero, joder, once tíos... Yo creo que antes de matar al santo hay que desvestirlo. (Se refiere a una mayor investigación antes de montar ese dispositivo).

¿Entiende que se le hayan cancelado los contratos por el estigma de la imputación?

Pues no lo entiendo. Pero bueno, es igual que la prensa. ¿Tú crees que ahora se van a enterar todos de que soy inocente?

La amistad con su ayudante (juzgado por abusos sexuales) le ha perjudicado.

No era amigo. ¿Tú eres amigo de la persona que lava en tu casa? Algunos han dicho que hasta me acostaba con él. Tenía ganas de que saliera de mi casa. Y no precisamente por incidentes de este tipo. Nunca en la vida habíamos visto nada.

Descarta ahora que puedan aparecer más víctimas...

Pues si hizo algo en su país el tiempo que vivió, que lo averigüen. Pensaba que se refería a más menores en mi caso.

Se habló de otras dos personas, sí.

Sí, de 52 años cada uno. Se dijo que yo, en esas fiestas que hacía, me desnudaba y bailaba con ellos. Y lo demás ya no lo digo... Pero también se dijo.

Precisamente, el auto recoge que una de las denunciantes hablaba de esas fiestas.

Ella nunca ha estado en mi casa.

Y esas fiestas, ¿qué son?

Una comida el domingo con mi cuñada, mi sobrino, con este, con el otro, con sus hijos... Se han hecho toda la vida. Y nunca he tenido ningún problema.

¿Se va a replantear esto? Por ejemplo, suspender estas reuniones o la presencia de niños en su chalé.

La gente que me conoce no ha dudado ni un segundo. Yo voy a seguir igual. ¿Qué voy a tener ahora que no ver a los niños? ¿No dejarles entrar? ¿Pedirles el carné de identidad? Todo lo contrario.

Un detalle en el caso que ha sorprendido. Tras la agresión de su ayudante a un adolescente, usted se fue y los dejó solos.

No es así. Dejé al menor en mi habitación con la puerta cerrada y antes de eso había tirado a esta persona. Estaba en la parte de bajo de la casa. Le dije que no lo quería ver. Se fue a hacer las maletas y a pirarse.

¿Usted entiende que a la gente le extrañe que un menor se quede a dormir en una casa con dos adultos?

No.

¿Confía en que todo se olvide?

No. Ojalá. A mí seguro que no se me va a olvidar.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios