La nueva ordenanza de Valencia rebaja o suprime diez infracciones a ciclistas

La normativa actual establece que la prioridad en el estacionamiento de bicicletas deben ser los aparcabicis. Cuando no haya ninguno disponible a menos de 50 metros, entonces los ciclistas podrán atar las bicis a «elementos del mobiliario urbano, a excepción de las farolas de alumbrado público». Esta coletilla desaparece del borrador de la futura ordenanza para facilitar el estacionamiento con una práctica que ahora se sanciona con cien euros, que sí mantiene la prohibición en lo que respecta al arbolado.

De 200 a 100 euros. Esa es el cambio del importe de la infracción por usar cascos o auriculares cuando se circula en la bicicleta. La redacción propuesta es la siguiente: «No se permite circular utilizando cascos o auriculares conectados a aparatos reproductores de sonido, ni el uso durante la conducción de dispositivos de telefonía móvil, así como cualquier otro medio o sistema de comunicación que implique uso manual». Esta prohibición no aparece ni en el apartado de graves ni en el de muy graves, pese a las frecuentes campañas que realiza la Dirección General de Tráfico para concienciar a los conductores que no deben despistarse.

La normativa por la que ahora se rigen los ciclistas indica que en «circulación nocturna los ciclistas llevarán colocada una prenda reflectante que permita a los conductores de vehículos y demás usuarios distinguirlos hasta una distancia de 150 metros». El borrador tiene una redacción semejante, pero con una diferencia sustancial, al señalar que «se recomienda que quien conduzca una bicicleta use una prenda, chaleco o bandas reflectantes». Es decir, la concejalía de Movilidad ve conveniente este recurso para prevenir accidentes de tráfico, pero lo deja como una recomendación y, por lo tanto, ya no se multará.

El artículo 40.4 de la actual ordenanza señala que «circular por pasos a distinto nivel, subterráneos o elevados» es una acción prohibida a los usuarios de bicicletas. El borrador no incluye nada parecido, dado que sólo utiliza en tres normas la palabra «túnel». La primera es cuando obliga a los vehículos a motor a apagarlo cuando están más de dos minutos parados. La segunda, cuando se indica que está prohibido el estacionamiento, y la tercera cuando lo anterior se considera una sanción catalogada como grave. De igual manera, tampoco hay menciones a las pasarelas peatonales, que se mantienen en pocas zonas de Valencia, como para salvar las vías en el barrio del Parque Central.

Circular utilizando la bicicleta como medio para el ejercicio de actividad publicitaria con o sin dispositivo especial salvo en los supuestos permitidos en esta ordenanza está calificado ahora como sanción grave, con una cuantía de 200 euros. El borrador mantiene la prohibición, pero no la incorpora en el capítulo de las graves, por lo que automáticamente se traslada a las leves, justo con la mitad de la cuantía. Se trata de una práctica que cada vez será más utilizada por las empresas y que ahora se reforzará con la utilización de nuevos vehículos sin motor como los ciclos de tres ruedas.

La ordenanza de 2010 incluye como una infracción grave «circular por zonas peatonales o cualquier otra vía en las que expresamente esté prohibida la circulación de bicicletas o que no se den las condiciones de seguridad descritas en esta ordenanzas». El borrador actual abunda en este tipo de respeto a los viandantes, como ocurre cuando habla de la circulación en parques y jardines o en las zonas con restricción de tráfico y limitación de velocidad, una figura muy desarrollada dentro de la estrategia de peatonalización. Por el contrario, no se encuentra entre las cuatro infracciones graves que se desgranan, por lo que de manera automática pasa a leve, es decir, cien euros. Los agentes de la Policía Local tendrán la alternativa de recurrir a otro artículo que se mantiene, redactado ahora como sanción muy grave la «conducción manifiestamente temeraria» y que en el borrador se indica como «circular en bicicleta, vehículos de movilidad personal o ciclos de más de dos ruedas poniendo en peligro la seguridad de los peatones».

«Circular con pasajero cuando el diseño y la construcción de la bicicleta no permita ser ocupada por más de un pasajero, salvo lo dispuesto en el artículo 38. Ahora se considera una sanción grave, mientras que el borrador la pasa a leve, al desaparecer en la relación de las que se sancionan con un importe de 200 euros. La nueva ordenanza sí que dedica un amplio apartado al transporte de personas y carga en ciclos para uso personal, donde sí aparece esta prohibición, con la precisión de que los asientos para niños podrán ser utilizados hasta una edad de siete años y siempre con casco. Igual habla de la utilización de remolques o cajas delanteras, pero no indica que puedan ir dos menores en la bici.

El incumplimiento en la prioridad de paso y adelantamientos esta catalogado como una infracción grave, que en la nueva redacción no aparece, por lo que debe ser leve. La futura normativa indica sobre la posición en la vía que «en aquellas vías donde las personas en bicicleta circulen por la calzada, y que dispongan de al menos dos carriles de circulación por sentido, las bicicletas utilizarán preferentemente el carril derecho. De existir carriles reservados a otros vehículos, las bicicletas circularán por el contiguo al reservado. Podrán circular por los otros cuando vayan a cambiar de dirección o cuando lo precisen y podrán adelantar y rebasar a otros vehículos por la derecha o por la izquierda.

La conducción con maniobras bruscas, frenadas o derrapes injustificadamente, así como circular con una sola rueda, en suma, la circulación negligente, está ahora catalogado como sanción grave con una multa de 200 euros. El nuevo borrador no incluye ese artículo y el que más se aproxima es uno definido como muy grave, referido a la conducción temeraria o poniendo en peligro la seguridad de los peatones. Quedará por lo tanto a interpretación de los policías locales.

La ordenanza actual dedica un artículo a la prohibición de atar con cualquier sistema o procedimiento las bicicletas a elementos adosados a las fachadas. El borrador que ahora estudian los servicios municipales no precisa nada al respecto, por lo que desaparece como sanción leve en caso de que salga adelante. Sí que detalla la prohibición de estacionar las motos junto a los edificios, antes de concretar las condiciones en las que se podrá hacer. Por el contrario, hay un amplio apartado a los nuevos tipos de estacionamiento, incluso fuera de los aparcabicis.