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La vivienda destruida por el incendio en la calle Escalante. Jesús Signes
Un incendio destruye una vivienda ocupada de forma ilegal en la calle Escalante

Un incendio destruye una vivienda ocupada de forma ilegal en la calle Escalante

La Policía Nacional desarticula un punto de venta de droga en el distrito de los Poblados Marítimos tras detener a cuatro traficantes

J. MARTÍNEZ

Valencia.

Sábado, 9 de diciembre 2017, 22:47

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Un incendio destruyó el jueves por la noche una vivienda ocupada de forma ilegal por una pareja de nacionalidad rumana en el barrio valenciano del Canyamelar. El fuego se inició pocos minutos antes de las 21 horas y destruyó totalmente la casa en el cruce de las calles Escalante y Mariano Cuber, según informaron fuentes municipales.

Tres patrullas de la Policía Local de Valencia acudieron con urgencia al lugar y auxiliaron a las dos personas que residían en la vivienda. El hombre sufrió una crisis de ansiedad y los policías tuvieron que reducirlo, porque empujó a un agente y le rompió las gafas. También intentó entrar en la casa en llamas para salvar a su perro, pero los policías locales impidieron esta acción tan peligrosa. El fuego ya se había extendido por toda la vivienda y la víctima podría haber muerto en el incendio.

Cuando los bomberos llegaron a la calle Escalante, el techo y varias paredes ya se habían derrumbado debido a la virulencia de las llamas. La vivienda siniestrada no tenía corriente eléctrica, por lo que los dos ocupantes se alumbraban con velas y calentaban la estancia con una estufa de gas butano.

Otra intervención de la Policía Nacional de Valencia se ha saldado con la desarticulación de un punto de venta de drogas en el distrito de los Poblados Marítimos tras la detención de cuatro personas, de entre 20 y 46 años de edad, por los delitos de organización criminal, tráfico de drogas y tenencia ilícita de armas.

Los agentes realizaron tres registros en domicilios en los que intervinieron 90 gramos de cocaína, otros 47 de heroína, dos básculas, un revólver, 430 euros y un móvil. Un padre y su hija vendían las drogas en su vivienda, según las investigaciones.

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