El TSJ investigará la concesión de la APV al Club Náutico tras los recursos de Alcara

De hecho, según el representante de la mercantil, Paco Herrero, el juzgado ha decidido agrupar los tres contenciosos que han interpuesto contra la APV. Alcara Infraestructuras recurrió a la justicia ante las decisiones tomadas por la Autoridad Portuaria de Valencia durante los años que ha durado este proceso de adjudicación.

En primer lugar, por admitir el recurso de reposición de la actual directiva donde denunciaron un defecto de forma en el aval presentado por la mercantil alegando que estaban fuera del plazo establecido. Una segunda demanda por la publicación en el BOE del trámite de competencia donde sólo se queda el Club Náutico como único candidato a optar a la concesión dejando al margen del concurso a la empresa privada, y un último contencioso por la publicación de la adjudicación de la concesión en el BOE, otorgando el proyecto a los actuales gestores.

Ante esta maraña judicial, serán los tribunales quienes decidan si finalmente todo sigue su curso y la directiva que preside Daniel Vidal continúa adelante con sus planes. Desde Alcara, su representante ha dejado claro que tras la decisión de la APV «no nos hemos retirado y llegaremos hasta el final para defender nuestros intereses».

Y es que desde la mercantil siempre han señalado que se han cometido irregularidades en el proceso y han cuestionado el por qué la APV les concedió la gestión en un primer momento, y luego se retractó admitiendo el recurso de la directiva actual. No entienden como su proyecto pasó de ser válido durante varios meses a quedarse fuera posteriormente alegando la APV un defecto de forma, es decir, presentar fuera de plazo la garantía provisional. Una cuestión que desde Alcara han considerado siempre un «trámite con una interpretación discutible».

Esta nueva situación deja patente que no hay posibilidad de acuerdo ya que la empresa está dispuesta a luchar en los tribunales por una concesión de la que le han apartado. Unas demandas, que en ningún momento van dirigidas contra los actuales gestores de las instalaciones deportivas, sino contra las decisiones tomadas por la APV que consideran «injustas».

Por su parte, el presidente del Club Náutico se ha mostrado tranquilo ya que considera que «lo normal es que se admita a trámite y lo estudien en profundidad», pero esta decisión de la justicia «no va a paralizar nada». De hecho, Vidal apuntó que en estos momentos están perfilando los últimos retoques del proyecto de remodelación de las instalaciones y que tienen previsto presentar a los socios este mes.

La actuación propuesta por la directiva que preside Vidal contempla un paseo de casi medio kilómetro rodeado de comercios y restaurantes y un edificio totalmente nuevo con una inversión de tres millones de euros que está previsto que sea una realidad en dos años, desde que se inicien las obras que podrían comenzar en marzo de 2019.

Además, con el nuevo proyecto, las instalaciones pasarán a tener 48.000 metros cuadrados de dominio público marítimo terrestre, más 8.000 metros de lámina de agua, y cinco metros de ancho en el paseo del Moll dels Borja. Una zona que servirá para amarrar embarcaciones superiores a 30 metros, unos barcos que en la actualidad no tienen cabida en el recinto deportivo.