El álbum de la infancia de Majo Gimeno
Jueves, 30 de abril 2020, 01:20
Majo Gimeno fue una niña buena, dócil y obediente que disfrutó de una infancia cálida y familiar. Sus padres la tuvieron cuando estaban estudiando COU, y a pesar de ello las respectivas familias les animaron a seguir con los estudios, pues su padre era un estudiante brillante con una mente privilegiada que estaba destinado a convertirse en médico. «Yo pasaba mucho tiempo con mis abuelos mientras ellos estaban en clase o preparaban los exámenes.», explica la especialista en márketing y fundadora de la oenegé Mamás en Acción. A Majo le encantaba pintar y tenía en mente convertirse en artista, de hecho no veía la tele porque prefería dibujar y por sus cumpleaños pedía que le regalasen libros de dibujo. «Quise estudiar Bellas Artes pero me animaron a hacer ‘una carrera de verdad’, me quedé con las ganas y lo tengo ahí dentro. Estos días de cuarentena estoy pintando mucho con mi hija Adela». Sus padres le inculcaron el valor del respeto a los demás y la empatía con aquellos que no lo tienen tan fácil. De hecho cuando ella tenía dieciocho años y su hermana Alicia catorce sus padres recibieron en acogida a Edon y Agim, dos niños kosovares que con el tiempo se convirtieron en sus hermanos y que hoy conforman la familia de esta mujer valiente y luchadora.
Texto: Elena Meléndez | Fotos: Irene Marsilla
Era una niña buena, tranquila y familiar que disfrutaba mucho de las tardes con su abuela.
Texto: Elena Meléndez | Fotos: Irene Marsilla
El día que llevó las aras en la boda de su tía María José. «Es la hermana de mi padre y, además, mi madrina, la quiero muchísimo».
Texto: Elena Meléndez | Fotos: Irene Marsilla
Majo con su primo Miguel durante unas Fallas. «Soy fallera desde antes de andar».
Texto: Elena Meléndez | Fotos: Irene Marsilla
Majo, de su primera comunión: «Las monjas de mi colegio nos enseñaron unos valores y ahora agradezco mucho aquella educación».
Texto: Elena Meléndez | Fotos: Irene Marsilla
Sobre sus amigas: «Empezamos con dos años y pasamos juntas todos los años que duró el colegio. Llevo toda mi vida con ellas, son como mi familia».
Texto: Elena Meléndez | Fotos: Irene Marsilla