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El álbum de la infancia de Jarr

Lunes, 22 de junio 2020, 00:39

Nacido en Algemesí, su niñez fue muy familiar, rodeado siempre por sus padres, su hermano Eugenio y dos hermanas de su madre con las que se llevaba poco años que ejercían más de hermanas que de tías. «Disfruté lo bueno de crecer en un pueblo, no tiene nada que ver con como se crían ahora los niños, me entretenía mucho con las manualidades, no era de estar siempre en la calle. Era muy tranquilo, mi madre dice que doy más guerra ahora que de pequeño», reconoce con humor. Jarr empezó a cantar en el coro Juan Bautista Cabanilles de Algemesí, donde fue pasando por todos los niveles y donde también había un grupo de danza. La profesora de ballet clásico que impartía las clases descubrió que Jarr tenía una habilidad y predisposición especiales y lo animó a continuar. «Cuando acabé los estudios entré en el Instituto de Teatre de Barcelona para hacer danza contemporánea, lo compaginé con Artes y Oficios, sabía que quería dedicarme a algo artístico». Los veranos los pasaba toda la familia junta en Albalat, donde les encantaba salir de excursión, hacer camping o ir a pasar el día al Perelló, a Cullera o a Palmeretes. «Desde siempre he tenido muy interiorizada mi tierra, me encanta estar en Valencia, sé que en Madrid tendría más posibilidades a la hora de exponer, pero no concibo vivir en otro lugar». — Nacido en Algemesí, su niñez fue muy familiar, rodeado siempre por sus padres, su hermano Eugenio y dos hermanas de su madre con las que se llevaba poco años que ejercían más de hermanas que de tías. «Disfruté lo bueno de crecer en un pueblo, no tiene nada que ver con como se crían ahora los niños, me entretenía mucho con las manualidades, no era de estar siempre en la calle. Era muy tranquilo, mi madre dice que doy más guerra ahora que de pequeño», reconoce con humor. Jarr empezó a cantar en el coro Juan Bautista Cabanilles de Algemesí, donde fue pasando por todos los niveles y donde también había un grupo de danza. La profesora de ballet clásico que impartía las clases descubrió que Jarr tenía una habilidad y predisposición especiales y lo animó a continuar. «Cuando acabé los estudios entré en el Instituto de Teatre de Barcelona para hacer danza contemporánea, lo compaginé con Artes y Oficios, sabía que quería dedicarme a algo artístico». Los veranos los pasaba toda la familia junta en Albalat, donde les encantaba salir de excursión, hacer camping o ir a pasar el día al Perelló, a Cullera o a Palmeretes. «Desde siempre he tenido muy interiorizada mi tierra, me encanta estar en Valencia, sé que en Madrid tendría más posibilidades a la hora de exponer, pero no concibo vivir en otro lugar».
Texto: Elena Meléndez | Fotos: LP

Nacido en Algemesí, su niñez fue muy familiar, rodeado siempre por sus padres, su hermano Eugenio y dos hermanas de su madre con las que se llevaba poco años que ejercían más de hermanas que de tías. «Disfruté lo bueno de crecer en un pueblo, no tiene nada que ver con como se crían ahora los niños, me entretenía mucho con las manualidades, no era de estar siempre en la calle. Era muy tranquilo, mi madre dice que doy más guerra ahora que de pequeño», reconoce con humor. Jarr empezó a cantar en el coro Juan Bautista Cabanilles de Algemesí, donde fue pasando por todos los niveles y donde también había un grupo de danza. La profesora de ballet clásico que impartía las clases descubrió que Jarr tenía una habilidad y predisposición especiales y lo animó a continuar. «Cuando acabé los estudios entré en el Instituto de Teatre de Barcelona para hacer danza contemporánea, lo compaginé con Artes y Oficios, sabía que quería dedicarme a algo artístico». Los veranos los pasaba toda la familia junta en Albalat, donde les encantaba salir de excursión, hacer camping o ir a pasar el día al Perelló, a Cullera o a Palmeretes. «Desde siempre he tenido muy interiorizada mi tierra, me encanta estar en Valencia, sé que en Madrid tendría más posibilidades a la hora de exponer, pero no concibo vivir en otro lugar».

Nacido en Algemesí, su niñez fue muy familiar, rodeado siempre por sus padres, su hermano Eugenio y dos hermanas de su madre con las que se llevaba poco años que ejercían más de hermanas que de tías. «Disfruté lo bueno de crecer en un pueblo, no tiene nada que ver con como se crían ahora los niños, me entretenía mucho con las manualidades, no era de estar siempre en la calle. Era muy tranquilo, mi madre dice que doy más guerra ahora que de pequeño», reconoce con humor. Jarr empezó a cantar en el coro Juan Bautista Cabanilles de Algemesí, donde fue pasando por todos los niveles y donde también había un grupo de danza. La profesora de ballet clásico que impartía las clases descubrió que Jarr tenía una habilidad y predisposición especiales y lo animó a continuar. «Cuando acabé los estudios entré en el Instituto de Teatre de Barcelona para hacer danza contemporánea, lo compaginé con Artes y Oficios, sabía que quería dedicarme a algo artístico». Los veranos los pasaba toda la familia junta en Albalat, donde les encantaba salir de excursión, hacer camping o ir a pasar el día al Perelló, a Cullera o a Palmeretes. «Desde siempre he tenido muy interiorizada mi tierra, me encanta estar en Valencia, sé que en Madrid tendría más posibilidades a la hora de exponer, pero no concibo vivir en otro lugar».

Con sus padres, María Rosa y Mariano, y su hermano Eugenio. «No tengo muchas fotos de pequeño, en mi familia no eran de fotografiar». — Con sus padres, María Rosa y Mariano, y su hermano Eugenio. «No tengo muchas fotos de pequeño, en mi familia no eran de fotografiar».
Texto: Elena Meléndez | Fotos: LP

Con sus padres, María Rosa y Mariano, y su hermano Eugenio. «No tengo muchas fotos de pequeño, en mi familia no eran de fotografiar».

Con sus padres, María Rosa y Mariano, y su hermano Eugenio. «No tengo muchas fotos de pequeño, en mi familia no eran de fotografiar».

«A mi hermano le lloraban los ojos por el flash, así que me pusieron a mí en primer plano». — «A mi hermano le lloraban los ojos por el flash, así que me pusieron a mí en primer plano».
Texto: Elena Meléndez | Fotos: LP

«A mi hermano le lloraban los ojos por el flash, así que me pusieron a mí en primer plano».

«A mi hermano le lloraban los ojos por el flash, así que me pusieron a mí en primer plano».

«En el colegio la plástica se me daba genial y el resto lo iba sacando». — «En el colegio la plástica se me daba genial y el resto lo iba sacando».
Texto: Elena Meléndez | Fotos: LP

«En el colegio la plástica se me daba genial y el resto lo iba sacando».

«En el colegio la plástica se me daba genial y el resto lo iba sacando».

Jarr junto a su familia en Algemesí el día de la bicicleta. — Jarr junto a su familia en Algemesí el día de la bicicleta.
Texto: Elena Meléndez | Fotos: LP

Jarr junto a su familia en Algemesí el día de la bicicleta.

Jarr junto a su familia en Algemesí el día de la bicicleta.

«Durante un curso con Ramón Oller en Francia, él me aconsejó que fuera a audicionar a una escuela de allí». — «Durante un curso con Ramón Oller en Francia, él me aconsejó que fuera a audicionar a una escuela de allí».
Texto: Elena Meléndez | Fotos: LP

«Durante un curso con Ramón Oller en Francia, él me aconsejó que fuera a audicionar a una escuela de allí».

«Durante un curso con Ramón Oller en Francia, él me aconsejó que fuera a audicionar a una escuela de allí».

Con Jacqueline de la Vega en un reportaje para una sesión fotográfica con ropa de Francis Montesinos. — Con Jacqueline de la Vega en un reportaje para una sesión fotográfica con ropa de Francis Montesinos.
Texto: Elena Meléndez | Fotos: LP

Con Jacqueline de la Vega en un reportaje para una sesión fotográfica con ropa de Francis Montesinos.

Con Jacqueline de la Vega en un reportaje para una sesión fotográfica con ropa de Francis Montesinos.

Junto a uno de sus murales. «Fue seleccionada por el IVAM y es una de mis piezas favoritas». — Junto a uno de sus murales. «Fue seleccionada por el IVAM y es una de mis piezas favoritas».
Texto: Elena Meléndez | Fotos: LP

Junto a uno de sus murales. «Fue seleccionada por el IVAM y es una de mis piezas favoritas».

Junto a uno de sus murales. «Fue seleccionada por el IVAM y es una de mis piezas favoritas».

«En mi época en Barcelona trabajé de modelo pero no era lo mío, lo hice para ganar dinero». — «En mi época en Barcelona trabajé de modelo pero no era lo mío, lo hice para ganar dinero».
Texto: Elena Meléndez | Fotos: LP

«En mi época en Barcelona trabajé de modelo pero no era lo mío, lo hice para ganar dinero».

«En mi época en Barcelona trabajé de modelo pero no era lo mío, lo hice para ganar dinero».

En la retrospectiva que hizo en Torrent. La pieza se titula ‘Capas y subcapas’. — En la retrospectiva que hizo en Torrent. La pieza se titula ‘Capas y subcapas’.
Texto: Elena Meléndez | Fotos: LP

En la retrospectiva que hizo en Torrent. La pieza se titula ‘Capas y subcapas’.

En la retrospectiva que hizo en Torrent. La pieza se titula ‘Capas y subcapas’.

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