Los delitos a los que se enfrenta José María Ángel: falsedad de documento y malversación continuada
En socialista sólo debería devolver dinero si ha cobrado en los últimos cuatro años y en principio la cantidad de su jubilación no se vería afectada
El alto comisionado del Gobierno para la reconstrucción, José María Ángel, ya está bajo la lupa de la Fiscalía desde hace varias semanas por ... el caso de la falsificación de una diplomatura universitaria para optar a una plaza de funcionario B –actual A2– en 1985. Un caso que ha golpeado los cimientos del PSPV, ya tocado por los cabos sueltos en el expediente de la delegada del Gobierno, Pilar Bernabé.
Ángel, según las fuentes consultadas, se enfrenta a la comisión de una serie de presuntos delitos. El primero de ellos el de falsear un documento público para acceder a una plaza de funcionario sin tener la titulación requerida, lo que implica un aumento considerable de sueldo por ocupar una plaza de mayor rango, lo que derivaría en la comisión de un delito continuado de malversación, ya que percibió unos emolumentos sin estar capacitado para ello.
La otra variante será la usurpación de funciones públicas al desarrollar una tarea que no debería haber ejercido porque en ningún caso podría haber optado a la plaza si no llega a falsificar su título de diplomado. Una de las medidas que puede tomar la Diputación de Valencia, y así lo ha insinuado su presidente, Vicente Mompó, es declarar la nulidad de la plaza, algo que la propia Corporación podría aprobar y darle carácter de efectividad desde el mismo momento en la que la asumió, es decir, en 1986.
Esta decisión sería más un gesto que otra cosa, porque en realidad no supondría una bocado muy importante a la cuenta corriente de Ángel, que sólo debería devolver el 'exceso de nómina' en el caso de que la haya cobrado durante los últimos cuatro años. Para el resto de los años, el delito estaría prescrito.
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Además, en principio tampoco afectaría a su jubilación ya que la Diputación de Valencia, aunque su trabajador haya accedido al puesto de funcionario presuntamente de manera fraudulenta, ha cotizado por él como si fuera un funcionario con el nivel A2, por lo que su pensión futura no se vería afectada por el cambalache en el acceso a ese puesto de la función pública, según las fuentes consultadas.
José María Ángel fue nombrado como funcionario de carrera de grupo C en abril de 1983 y se le reconocieron los dos años ejercidos como grupo D. El 21 de marzo de 1986, entró a forma parte del grupo B, hoy conocido como A2, durante el mandato de Antonio Asunción. El delito al que se puede enfrentar Ángel por falsear la documentación es al de malversación continuada por haber ejercido sin titulación.
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