La reforma de la Avenida del Carmen incluirá la sustitución del arbolado

La Avenida del Carmen en Cox lucirá un nuevo aspecto en unas semanas, cuando se complete el proyecto de reurbanización del acerado que ha arrancado esta semana. Al anunciado proyecto se le suma el traslado del actual arbolado, que se sustituirá por otros ejemplares que ocasionen menos molestias a los vecinos y que no produzca roturas en el nuevo suelo a instalar.

La empresa adjudicataria prevé que en el plazo de tres meses transformará por completo la principal arteria del municipio. Esta actuación se hacía necesaria para eliminar las barreras arquitectónicas existentes en la vía y también para mejorar la visibilidad en los cruces de las calles adyacentes. La rehabilitación comprende la renovación del acerado, el bordillo y la creación de rampas desde la calle Isidoro Díez, en la Glorieta, hasta la confluencia con Juan XXIII y El Rosal.

El alcalde, Carmelo Rives, resalta que «hemos pensado en trasladar el arbolado actual hasta las piscinas municipales donde hacía falta más sombra». Esta actuación se lleva a cabo ya que los ejemplares se acaban de podar y los próximos días suponen una fecha idónea para el traslado de arbolado. En este sentido, El Carmen cambiará su fisonomía al disponer de cítricos como el naranjo cuyas raíces, «no se extienden tanto como las que hay ahora». Asimismo, algunos cojenses se quejaban de que las hojas de los actuales ejemplares tapan ventanas y causaban mucha suciedad.

Por otra parte los peatones se benefician al a colocar un nuevo tipo de pavimento con una baldosa rugosa, que evita los deslizamientos durante los días de lluvia. Esta mejora, junto a la eliminación de unos pivotes de hierro, permiten un mejor trasiego de personas con movilidad reducida.

El aspecto para regular el tráfico también se tiene en cuenta con la creación de las llamadas 'raquetas' o salientes en las aceras que permitan a los conductores tener una mayor visibilidad a la hora de cruzar la avenida desde las calles adyacentes. Estos nuevos elementos urbanos se van a ubicar en los cruces más peligrosos. La otra permuta implica mover uno de los semáforos de esta calle. El proyecto solo comprende una parte del vial, que «es donde más falta hacía», señala el primer edil. Los trabajos ascienden a unos 120.000 euros que sufraga la Diputación Provincial, que también ha proyectado la renovación por fases de varios tramos de la Avenida Juan Carlos I en Granja de Rocamora, una vía que se encuentra unida con a travesía cojense.