El Gobierno asegura en la cumbre de Valencia que los tratados de la UE no afectarán a las naranjas

Porque convenios globales de este tipo suelen tener una repercusión general positiva para el consumidor, pero al mismo tiempo pueden provocar problemas en determinados sectores. En el foco del debate están las negociaciones con Mercosur que, según el ministro español Héctor Gómez, «este semestre puede ser una realidad» porque «se dan las condiciones».

Eso sí, el representante del Gobierno y anfitrión de la cumbre informal por la presidencia española europea ha querido dejar claro «que en ningún caso los acuerdos comerciales que se están articulando van a tener consecuencias negativas para la producción en España o en esta comunidad autónoma». Una respuesta que ha dado al ser preguntado por la citricultura nacional donde la Comunitat Valenciana y sus naranjas son los grandes protagonistas.

Pero los agricultores no se creen las palabras de Gómez y, de hecho, han convocado una pequeña protesta en las inmediaciones de la Ciudad de las Artes y las Ciencias para criticar este acuerdo. Pequeña porque la Delegación del Gobierno no autorizó una tractorada por no enviar la solicitud en tiempo y forma y por la alerta antiterrorista.

Cristóbal Aguado y Carles Peris, principales responsables de Ava-Asaja y la Unió Llauradora y Ramadera, han sido muy críticos con este tipo de tratados, que consideran que crean injustas diferencias. «A nosotros se nos exigen unos estándares ecológicos que a otros países no y eso nos hace menos competitivos», han destacado.

Aguado ha señalado que en los acuerdos con la Unión Europea, la fruta y hortaliza valenciana "siempre ha sido la moneda de cambio". De hecho, ha aseverado que "los estudios de impacto que presenta Comercio en la Unión Europea para firmar estos acuerdos son todos manipulados, son todos falsos y con falta de objetividad"."Desde luego somos las víctimas", ha sentenciado.

Además, han recordado otros problemas derivados de estos acuerdos que han afectado a la citricultura valenciana. En el caso del de Sudáfrica no sólo implicó la entrada en el mercado de toneladas de naranjas del país sino también de plagas, lo que fomentó que la Unión Europea aprobase una fórmula de tratamiento en frío que sospechan que no se llega a aplicar del todo.

Más allá de este punto que ha sobrevolado el encuentro, los ministros de los 27 países han acercado posturas respecto a diferentes puntos que están en la agenda europea, aunque como se preveía no se ha llegado a ningún acuerdo concreto. Como han informado la secretaria de estado de Comercio, Xiana Méndez, y la comisaria europea Iliana Ivanova se ha debatido sobre la necesidad de que los instrumentos de seguridad económica que se articulen cuenten con "proporcionalidad y precisión", para tomar decisiones basadas "en datos justificados de los riesgos existentes", ajustando las herramientas con las que se cuenta y trabajando en otras nuevas, como controles de inversiones y las exportaciones.

También se han encarrilado negociaciones sobre diferentes tratados comerciales. El que más ha avanzado ha sido el relativo a la India, que es el que más recientemente se ha comenzado a tratar y se considera "extremadamente importante" en el momento geopolítico actual.

Por otro lado están los acuerdos con Mercosur o con países que ya había relaciones como Chile o México. En el primer caso, la secretaria de Estado ha insistido en que el objetivo es tratar de cerrarlo en los próximos meses, aunque es consciente que hay diferencias entre los países miembros y asuntos medioambientales que hay que atajar. Por su parte, el de México y en especial el de Chile parece mucho más cercano y se considera que quedan en especial flecos de tipo técnico.