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Nadie va a descubrir a estas alturas el poderío interior del Real Madrid. Ahí, todos los equipos asumen que van a recibir puntos en la ... pintura. Lo que resulta imposible de levantar es que, a eso, el acceso a la zona se convierta en una autopista sin peaje para los exteriores. El que mejor lo entendió fue Andrés Feliz, que fue el MVP del triunfo blanco, con 20 puntos en 19 minutos y un 8 de 11 en los tiros de ese rango. El conjunto de Chus Mateo anotó 60 de sus 96 puntos en la pintura, un 62,5% del total, con un 30 de 42 en tiros de dos. Así, es muy complicado llevarse un partido con victoria.
La derrota taronja complica las opciones de ser segundos porque, de nuevo, vuelven a no depender de sí mismos. Con cuatro partidos por jugar, los de Pedro Martínez tienen dos derrotas más que La Laguna Tenerife. Desde la tercera plaza, el Unicaja está una derrota por detrás (con average particular ganado por el Valencia Basket) con lo que también tendrán que cuidar esa lucha porque con el Barça coqueteando la quinta plaza, el cuarto puede tener un peaje envenenado para la primera ronda de playoff.
En el 46-44 que marcaba el descanso, cada equipo sumó muchos puntos en el lugar donde se siente más cómodo. Lo cual hacía que el partido estuviera abierto y, a la vez, los dos técnicos tuvieran claro por dónde tenían que incidir a sus jugadores para aumentar el nivel defensivo en el segundo tiempo. El Real Madrid anotó 26 puntos en la pintura, con un acierto bárbaro de 13 de 17 en tiros de campo, dando la sensación de que cada vez que algún deportista con camiseta blanca pisaba la parte del parquet más oscura era sinónimo de canasta segura. El Valencia Basket, con un 7 de 19, anotó 21 puntos desde el triple. Llegaron, además, en los momentos más adecuados. Desde la máxima renta blanca, un 33-23, los de Pedro Martínez afinaron la puntería para acercarse a cuatro (36-32) y, al descanso, a dos. Lo que sentenció al bando visitante es que esa tónica de los puntos recibidos en la pintura continuó en la segunda parte. Lo mejor, por sacar cosas positivas para el tramo final de la competición, es que los valencianos tuvieron orgullo en pista y no se dejaron ir cuando el marcador (91-72) amenazaba con una paliza. Esa capacidad competitiva también suma a medio y largo plazo.
Real Madrid: Campazzo (10), Abalde (7), Musa (16), Ndiaye (7) y Tavares (10), cinco inicial, Feliz (20), Fernando (12), Llull (-), Garuba (-), González (5), Hezonja (7) y Rathan-Mayes (2).
Valencia Basket: Montero (11), Badio (11), Ojeleye (12), Pradilla (12) y Costello (10), cinco inicial, Jovic (2), De Larrea (-), López-Arostegui (5), Puerto (7), Sestina (2), Reuvers (13) y Brimah (4).
Parciales: 27-20, 19-24 (46-44), 28-19 (74-63) y 22-26 (96-89).
Árbitros: Peruga, Sánchez Sixto y Fernández Esteban.
Incidencias: 9.000 espectadores. Se guardó un minuto de silencio por el fallecimiento de Rafael Rullán, exjugador del Real Madrid durante 18 temporadas.
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