Burgos: «Mi compromiso es con el Valencia Basket por convicción plena»
El técnico taronja asume con naturalidad la decisión del club de que continúe en el cargo la temporada 2021-2022 porque su único deseo es ayudar «donde sea necesario»
La Eurocup Women supuso, además del primer título del Valencia Basket, el estreno del palmarés de Rubén Burgos como entrenador. Formado como jugador en la cantera del Pamesa, donde Miki Vukovic fue su referente, el trofeo ganado en Hungría no ha variado su concepto de persona de club. Seguirá al frente del banquillo taronja en la temporada 2021-2022 pero el cargo dentro de la estructura de la entidad no es su preocupación. No es habitual en el mundo del deporte profesional ese tipo de relación contractual, no suele haber en su caso comunicado de renovación para la siguiente temporada por ejemplo, pero las dos partes siguen en la misma sintonía que le llevará a seguir con su contrato con el Valencia Basket (como club) y a dirigir al equipo por quinta temporada consecutiva.
-Campeón de Europa. Suena bien, eso no me lo negará.
-Suena muy bien, merecido y deseado por todos, por el club y por la afición.
-Se ha hablado mucho de lo que supone este primer título para el Valencia Basket. ¿Y para Rubén Burgos?
-A nivel personal era un objetivo muy importante desde que empezó el proyecto. En ese crecimiento que el club tenía en mente la palabra Europa siempre me ha marcado, el de pasear el nombre de Valencia por las canchas europeas y ganarnos un respeto. Ser campeonas en la segunda participación en la Eurocup es un logro tremendo.
-Ha sido un torneo corto pero muy exigente.
-Desde la primera burbuja, donde en teoría éramos el equipo favorito, se convirtió en un problema por los contagios que tuvimos. Fui el primero que se quedó fuera por Covid y no puede ayudar, como Ouviña y Juskaite y ahí el staff liderado por Santi Pérez y las jugadoras, que dieron un paso al frente sin haber podido entrenar previamente, fueron clave.
-Cuando llegan estas alturas de temporada hay que hablar del futuro. El suyo, tal y como confirmó Esteban Albert en las celebraciones del título a este periódico, pasa por su continuidad en el banquillo un año más.
-Mi compromiso es con el Valencia Basket por convicción plena, con el proyecto que es masculino, femenino y de formación en L'Alqueria. Ahí quiero sumar todo lo que pueda. El Valencia Basket es el club en el que me he formado, me ha permitido aprender una profesión, jugar y luego volver a ser entrenador. Ahora mismo quien dirige la parcela deportiva piensa que donde más puedo ayudar es en esta posición y es gente en la que confío y que se preocupa por mi formación. Plena confianza donde crean que pueda sumar, ya sea como entrenador del equipo femenino o mañana en cantera. Donde sea necesario. Mi compromiso es con la entidad.
-Los tres momentos hasta ahora más importantes de la historia del club han llegado con sufrimiento al límite, los dos ascensos y el primer título.
-Cuando se acumulan esas situaciones hablamos de mentalidad no de cosas casuales. Los equipos que actúan así, como aquel de José Canales para conseguir el ascenso a Liga Femenina 2 o en esas dos situaciones nuestras, lo que hay detrás es que se trabaja así en el día a día. Que cada entrenamiento se lucha hasta el último instante y que cada partido, sea cual sea el resultado, se está al cien por cien en la pista los cuarenta minutos. Eso hace que cuando llega un momento límite es tu día a día, la naturalidad con la que desarrollas tu profesión que en este caso es ser jugadora de baloncesto. No me sorprendió la concentración de las jugadoras en esa última jugada.
-¿En una jugada así además de una combinación perfecta de movimientos se necesita algo de fortuna? Fue inevitable pensar en la ayuda desde el cielo de Miki Vukovic y Martín Labarta.
-Seguro que todo tiene que ver y que Miki y Martín apretaron. Son cosas que no suelen pasar y no sé si volveremos a ganar una final por un punto y con una jugada de banda en el último segundo. Es muy idílico y más contra un equipazo como el Reyer Venecia que se mereció el título tanto como nosotras. Defendimos muy bien en el partido y no conseguíamos bajar su anotación, nos tuvimos que agarrar desde el acierto y la lectura ofensiva.
-Raquel Carrera es otra de las grandes historias de la final. ¿Dónde tiene su techo?
-Es una excelente jugadora de presente además de tener un espectacular futuro. Lo más importante es lo que transmite en la pista. Pude trabajar con ella como ayudante de Eric Surís en la selección U20, ella tenía 18 años, y me daba cuenta que era feliz en la pista. Allí es donde es natural, se expresa y disfruta. Así lo demuestra cada día, escucha, trabaja y sigue a rajatabla el plan individual que Santi Pérez le ha preparado para trabajar desde su rango de tiro a los movimientos. A Laura Gil le pedimos no que la tutelara pero sí que le aconsejara mucho, que le enseñara lo que es esta profesión desde alguien que es un ejemplo de esfuerzo y trabajo. Además de buena deportista es muy buena persona, es una chica espectacular. Tiene una educación deportiva muy buena y un entorno que sabe amortiguar muy bien todo. Estas cosas no son casuales.
-¿Se han ganado el derecho a pelear por el doblete?
-Lo que tenemos que poner es en valor esa segunda plaza en la Liga Regular que nos otorga de momento el partido de vuelta de cuartos de final en nuestra pista. Tenemos que pensar sólo en el Ensino, que es un equipo que ha tenido quince días para prepararse. Nos lo van a poner duro y tenemos que a la altura física y mental que tuvimos en Lugo.
-El detalle con Miki Vukovic en la camiseta de campeonas pasará a la historia. En Hungría también nos acordamos de Martín Labarta todos los presentes.
-La referencia a Miki Vukovic tiene todo el sentido del mundo porque es el que nos ha guiado a todos hasta aquí y el recuerdo para Martín Labarta también porque hubiera estado allí. La definición es que Martín hubiera estado en Hungría, detrás del banquillo y pendiente de que el equipo sólo pensara en jugar y él hacer de paraguas y de filtro como siempre hacía. Nos abrazamos a los dos virtualmente tras ganar el título porque les sentimos día a día.