El reto para 2020, asaltar la plusmarca mundial

Cuando Juan Roig cruzó la meta de la 10K Valencia Trinidad Alfonso a las 09:51 horas, parando su crono en un tiempo real de 1:16:25, recibió las primeras informaciones sobre los tiempos parciales del maratón, que apuntaban a que podían batirse los dos récords de una tacada. Con esa opción encima de la mesa, el presidente de la Fundación Trinidad Alfonso, la pata financiera de la carrera como reconoció durante la mañana junto a Paco Borao, esperó sin desprenderse del pantalón corto a que los etíopes Leul Gebreselassie y Ashete Dido firmaran la edición perfecta, pulverizando las mejores plusmarcas en suelo español.

La mezcla de alegría, desbordada junto a sus hijas en la cercana zona VIP del arco de meta, y de adrenalina por los registros conseguidos tuvieron un efecto inmediato. Cuentan las personas que trabajan cerca de Juan Roig, en cualquiera de sus múltiples frentes abiertos, que al jefe le gusta 'apretar' cuando se consigue un objetivo. El de ayer, abrazado al organizador del Maratón Valencia Trinidad Alfonso, fue un órdago a la grande: «Estamos muy contentos, gracias a Correcaminos y a Paco Borao que han hecho mucho por el maratón. Nosotros estamos empujando y lo que se demuestra es que en la periferia también se hacen cosas y en Valencia tenemos el récord del maratón, de momento sólo en España y en 2020 iremos a por el récord del mundo. En 2020 iremos a por el de los hombres y luego en 2021 a por el de las mujeres».

Tan seguro estaba de lo que acababa de anunciar que lo repitió de nuevo en inglés, para que los periodistas internacionales tuvieran la frase exacta, antes de reconocer lo que supone para él el crecimiento de la prueba: «Estamos muy emocionados. Toda mi familia está muy contenta y también tiene que estarlo toda Valencia, la Comunitat y España por haber conseguido ésto». En 2020, la prueba del algodón.