El MuVIM y el IVAM batallan por el cómic
El museo de la Diputación prepara una exposición sobre el dibujante Sento Llobell para el próximo año | Las dos instituciones buscan atraer al público aficionado a la ilustración, aunque el centro de Cortés no prevé muestras de esta disciplina en 2018
«El IVAM abre sus puertas al cómic, que ha llegado para quedarse». La afirmación pertenece al director del IVAM, José Miguel G. Cortés, y fue pronunciada en junio de 2016 cuando la pinacoteca inauguró la exposición 'VLC. Valencia Línea Clara'. El museo de arte contemporáneo se abría así a un género que no formaba parte de su programación habitual. Tras esa exhibición, llegarían el caso de Caso de estudio sobre la obra del dibujante valenciano Daniel Torres, recogido en la muestra 'La casa. Crónica de una conquista'; la creación de una 'fanzinoteca' con la donación de Álvaro Pons y la compra de piezas (como obra de Miguel Calatayud) para la colección propia.
El IVAM abría sus abrazos al cómic y la ilustración. «La novela gráfica tiene la capacidad de crear mundos imaginarios, de hacernos soñar. No se puede entender la cultura visual de los siglos XX y XXI sin los dibujantes de cómic», resaltaba Cortés para remarcar la apuesta de su proyecto como titular del museo por este tipo de disciplina.
Previamente a la línea 'comiquera' del IVAM, el MuVIM, dependiente de la Diputación de Valencia, ya se había erigido como el impulsor de que el cómic se convirtiera en parte de la oferta cultural del un centro artístico. El centro había apostado fuertemente por los ilustradores de la Comunitat y abogó por visibilizar su influencia social y cultural. En la retina de los amantes del género se encuentra la muestra 'Paco Roca. Dibujante ambulante', una exhibición inaugurada en 2012 y que logró congregar a más de 12.000 visitantes.
El proyecto de Roca no fue sólo una excepción. En el espacio cultural de la calle Quevedo se han podido ver a lo largo de los últimos cinco años exhibiciones que se han convertido en todo un hito en la historia del museo. Desde 'Escena Il.lustrada', en 2015 -que recibió más de 4.000 asistentes-; a la reciente 'València en vinyetes', organizada este año y que fue vista por más de cerca de 9.000 personas, el centro cultural ha sido responsable directo de que el cómic se hiciera fuerte en el museo.
El MuVIM prepara otras exhibiciones de viñetas para la programación de 2018
A todas ellas hay que sumar la más reciente, 'Pioneros de la ilustración valenciana', una exhibición que rinde tributo a los maestros precursores de este género en la Comunitat que desarrollaron su trabajo de 1939 a 1959. La exposición recupera audiovisuales y personajes infantiles de profesionales valencianos como Rigalt, Payá y Pérez Arroyo.
El hecho de que dos museos de la ciudad dediquen sus muros a las viñetas es bien valorado por el sector valenciano de la ilustración, desde dibujantes hasta editoriales, y también por el público. La apuesta por el cómic continúa. El museo que dirige Rafael Company rendirá tributo a uno de los dibujantes valencianos más influyentes de la segunda mitad del siglo XX como es Sento Llobell. El MuVIM homenajeará a través de una exposición al creador de álbumes como 'El cartero audaz' (Edicions de Ponent); 'Un médico novato' (Sins Entido), primera parte de una trilogía sobre la Guerra Civil, basada en las memorias del doctor Pablo Uriel, su suegro, y que tiene su continuación en 'Atrapado en Belchite' (Autoedición) y en 'Vencedor y vencido' (Autoedición); y el más reciente 'Doctor Uriel' (Astiberri), entre otros.
No será este proyecto el único que vuelva a situar a la ilustración como objeto de culto para el museo. El MUVIM prepara dos muestras de viñetas para el próximo año. En cambio, en la programación que recientemente presentó Cortés para el IVAM, y que fue adelantada por LAS PROVINCIAS, no figura ninguna muestra sobre esta disciplina artística, pero sí organizará jornadas y actividades paralelas.
Las relaciones entre el IVAM y el MuVIM no atraviesan su mejor momentos. Sobre la mesa figura el proyecto de que el museo de la Diputación se convierta en subsede del IVAM, algo que fue considerado por Rafa Companya como «una OPA hostil neoliberal de un museo hermano».