Atracos en Valencia: «Soy menor y no me puedes hacer nada»
Una oleada de atracos a menores azota la zona de Torrefiel | Una vecina del barrio confiesa que teme denunciar a los jóvenes que hirieron a su niño. «Una amiga lo contó y pegaron a su hijo»
BELÉN HERNÁNDEZ
Martes, 20 de septiembre 2022
El hijo de Claudia fue a las 18.00 horas a la papelería. Veinte euros en su cartera y un trayecto de menos de diez ... minutos. Era la primera vez que el niño de 13 años iba solo a hacer un recado, su abuela o su madre siempre le acompañaban. A excepción de aquel terrible 25 de septiembre. Claudia no vio peligro en que su niño cruzara sólo a la papelería de enfrente. Eran las seis de la tarde y apenas se dilataría. Sin embargo, su pequeño volvió a casa tiritando. Su semblante tranquilo se transformó. Incapaz de articular palabra, temblaba sin cesar. «Mamá, me han atracado». El chico sólo quería comprar unos mapas que le habían pedido para clase cuando tres jóvenes, uno o dos años más mayores que él, consiguieron intimidarle. «Le robaron el dinero que llevaba en la cartera. También le hicieron sacar su móvil de su bolsillo. «No les gustó, así que no se lo llevaron», cuenta Claudia. Su nombre es ficticio. Vive con miedo de que los chavales vayan a por ella o a por su hijo.
Los abusadores no se dieron por vencidos tras atracarle. Dos de ellos le cogieron por los brazos, mientras otro le arreaba patadas por todo el cuerpo. «Cuando volvió tenía el pecho rojo y la espalda llena de arañazos. Las espinillas también las tenía llena de heridas», cuenta la madre. No han denunciado la agresión. Temen que el remedio sea peor que la enfermedad. No se trata de casos aislados, si no que el acoso en el parque de Torrefiel es parte de la tónica diaria. «No hemos presentado denuncia porque ya agredieron a un chico antes que a mi hijo. Le partieron la mandíbula superior e inferior», comenta Claudia. Una vez que la familia prestó el parte a la policía, el panorama empeoró. «Volvieron a por él y le dieron una paliza. No quiero que le pase lo mismo a mi niño». Las vecinas de Torrefiel han logrado crear una comunidad. Gran parte de ellas sufren en silencio por sus hijos. Claudia cuenta que a otro niño los mismos verdugos le partieron la tibia y el peroné. «Aunque mi hijo no los ha identificado todavía. Creo que es por miedo», dice la madre.
Los abusadores no se cortan en presencia de adultos. Claudia comenta que los chavales se metieron con el hijo de otra de sus amigas en su presencia, sin ningún tipo de reparo. «Le dijeron que ellos eran menores y podían hacer lo que quisieran. Pero que ella no podía hacerles lo mismo», cuenta con rabia la mujer. No da crédito.
«Me dijeron que iban a pegar a mi hijo y a hacer lo que les diera la gana con él. Les dije que por encima de mi cadáver»
Paula, (otro nombre figurado), también lleva a su hijo de 12 años a jugar al parque de Torrefiel. Aunque hace un año que la perspectiva cambió. «Cogen y le llaman 'moro'. Les lanzan limones de los árboles a los niños», ilustra la madre, preocupada. Ambas coinciden en que la presencia policial se limita a las horas matinales. Cuando el peligro todavía no acecha. Luego se sienten desprotegidas. Temen que sus hijos vayan solos a jugar al parque, aunque sea una dinámica que se haya seguido toda la vida. «A mí me dijeron que iban a pegar a mi hijo e iban a hacerle lo que les diera la gana. Les respondí que por encima de mi cadáver», desvela Paula, aterrada. Las madres de Torrefiel no duermen tranquilas desde que acechan a sus hijos a plena luz del día.
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