Valencia quemará más de la mitad de la paja del arroz para combatir la planta invasora

La localidad de Sueca, capital mundial del arroz, acoge hoy una reunión de los representantes de los consejos agrarios municipales con presencia en la Albufera. El encuentro servirá para coordinar la quema de la paja del arroz para evitar la acumulación de incendios controlados y reducir así las molestias. En el caso de Valencia, se quemará más de la mitad de la superficie e los arrozales ahora en cultivo.

El concejal de Devesa Albufera, Vicent Aleixandre, será uno de los participantes en la reunión. La Conselleria de Agricultura ha dejado en manos de los consejos municipales, aseguró el edil, la decisión acerca de unas quemas que no se hacían en el parque natural desde hacía 14 años.

El permiso ha estado motivado para frenar la expansión de una planta invasora en los campos, el conocido como falso arroz. Además, al estar en periodo de transición de las ayudas europeas, los incendios no estarán penalizados por las instituciones comunitarias.

En Valencia, comentó Aleixandre, habrá quemas controladas en un total de 649 hectáreas, mientras que en 449 hectáreas de arrozales se ha considerado que no es necesario. La planta invasora fue detectada por primera vez a mediados de 2013 en la zona sur del parque natural, aunque ahora la situación se ha complicado mucho más con la expansión a muchos tancats. El edil indicó que los incendios se extenderán en 91 de las 140 explotaciones de este tipo.

Por lo que respecta al total del parque, estimó que la acción del fuego será necesaria en 2.260 hectáreas. Representantes de los consejos agrarios de Sueca, Sollana, Valencia, Catarroja y Alfafar ya han establecido contacto para coordinar las quemas, que podrán realizarse a partir de hoy.

No obstante, la inundación de los campos por las lluvias impide estos trabajos, que podrían posponerse unas dos semanas, indicó el concejal. «Eso siempre que no llueva más en este tiempo», precisó.

La quema de la paja del arroz coincide con el reparto del borrador del Plan de Usos de la Albufera a los miembros de la junta rectora del parque natural. Estos incendios controlados no aparecen en el documento, debido a que se trata de una competencia exclusiva de la Conselleria de Agricultura, indicaron ayer fuentes de Medio Ambiente.

La única referencia que se hace es a las autorizaciones para la quema de carrizo, como «un método de gestión de la vegetación palustre; dicha operación se realizará con el seguimiento de la unidad administrativa competente para evitar daños a la fauna y la flora».

Sí que se habla en el plan de usos que «los agricultores deberán mantener el agua de sus campos en condiciones que permitan el desarrollo de la flora y fauna asociadas. Para ello realizarán la gestión más adecuada en función de las características de cada tancat, impidiendo que se den condiciones de anoxia. A estos efectos no se podrá inundar los campos hasta que hayan transcurrido 15 días desde su cosecha». Con esto se quieren evitar los fenómenos de pudrición en el humedal, lo que se produce siempre que no se recoge la paja de los campos, lo que acaba con los residuos en las acequias y, finalmente, en el lago.