Socialistas de la Vega críticos con la gestora se movilizan para pedir congreso y primarias

Un grupo de militantes de la Vega Baja ha creado una plataforma para reclamar a la gestora nacional que active el proceso para celebrar un congreso que ponga fin a la orfandad en la que están y se convoque el proceso de primarias a la secretaría general, sin titular desde octubre desde la dimisión de Pedro Sánchez.

En el grupo se encuentran como miembros más significativos el exsecretario general del PSOE oriolano, Carlos Bernabé, el portavoz de la ejecutiva comarcal, Rubén Ferrándiz, el secretario general de las Juventudes Socialistas de la Vega Baja, Daniel Nieves, el que fuera responsable en la ejecutiva comarcal del área de Medio Ambiente, Moisés cruz, o la exsecretaria comarcal de Igualdad, Mari Carmen Cabrera, junto a cerca de doscientos militantes y simpatizantes que han dado su apoyo al grupo con su adhesión a través de las redes sociales.

El oriolano Bernabé, que fue uno de los primeros en dejar el cargo, lo que ha abocado a la agrupación oriolana a estar dirigida por una gestora, explica que «la gestora no tiene por qué continuar porque lo que hay que hacer es activar el proceso para cuanto antes y salir de la parálisis en la que nos encontramos». Bernabé niega que sean 'pedristas' «pero a la voz de 'ya' hay que poner en marcha los mecanismos para marcar las actuaciones porque la gestora no es quien para fijar las líneas políticas» y recalca que lo que tiene que hacer la dirección provisional es «preparar el congreso y todo el proceso de las primarias». El exsecretario general de los socialistas oriolanos tiene claro que «lo que hay que hacer es escuchar a los militantes que se han sentido engañados porque el PSOE ha facilitado la investidura de Rajoy como presidente y no lo conciben» al tiempo que recuerda que «el PSOE es un partido de militantes donde siempre se les ha escuchado y en una situación como esta no debe ser menos y deben recuperar la voz». El motivo por el que surgió la plataforma, indica, «es porque cada vez más nos expresan sus inquietudes sobre cómo va a terminar todo este problema en el que estamos desde hace meses».

Otro de los que expresa sus opiniones sobre la necesidad de dar un vuelco a la crisis interna que viven los socialistas es el almoradidense Rubén Ferrándiz, que ejerce de portavoz de la ejecutiva comarcal. A su juicio la definición de los militantes como 'pedristas' no es adecuada «porque no se trata de tomar partido por él o por ningún otro pero lo que ocurrió en aquel comité federal se puede calificar de golpe de estado». Ferrándiz considera que la gestora no puede «seguir en la línea que lleva porque la sensación que damos es que la política interna es la de la conspiración». El portavoz de la ejecutiva precisa que no está en la primera línea de esta plataforma crítica «pero la apoyo porque no es de recibo que en aquella sesión se vayan diecisiete miembros para forzar esa dimisión sobre todo porque unos cuantos barones regionales lo que querían era la abstención para que gobernase el PP y eso no se puede concebir». Así las cosas dice que es mucha gente «con años de militancia, en los pueblos por ejemplo, la que se siente indignada, cabreada, humillada e impotente» porque añade «no se sienten representados dentro de un partido en el que de forma interna deciden cuatro obviando lo que piensan miles de afiliados y simpatizantes».

En su diagnóstico va más allá y se muestra contundente al afirmar que «el partido está roto entre los cargos y los militantes pero no solo se da a nivel nacional y al final una cuestión enquistada rompe por algún lado porque Rajoy de presidente ha sentado muy mal a las bases». Ferrándiz dice que su apoyo es porque «ese congreso se tiene que convocar ya lo que no implica hacerlo con precipitación porque lo que necesita el PSOE para remontar es un gran proceso de reflexión sobre el proyecto de partido y su situación pero contando con su gente». Por último dice que lo que se debe hacer «es poner todo en cuestión y a todos pero no estar en una situación de tranquilidad en falso».