El Ilicitano reacciona a costa de un Alcoyano en caída libre

Ha costado, pero por fin ha llegado. Ni más ni menos que 14 jornadas acumulaba el Elche Ilicitano sin saborear las mieles del triunfo. Y ayer, en sus dominios y echando mano del corazón, los franjiverdes rompieron su pésima racha para comenzar la reacción para poder salvar la categoría, a sabiendas, como bien recuerda Mir, que será «complicado pero no imposible». Toda piedra hace pared y los ilicitanos pusieron ante el Alcoyano la primera. Y lo hicieron después de una buena mitad y aprovechándose de la inferioridad numérica del rival.

Desde el comienzo, los pupilos de Mir dejaron claro que el partido era a vida o muerte y que estaban dispuestos a morder para ganar. Jairo se lució con dos grandes jugadas que metieron peligro a la meta del exfranjiverde Diego García hasta que a la tercera llegó su tanto. Fue de cabeza, cuando remachó un disparo de Hostench que dio en la cruceta. El papel bien podría haber cambiado cuando en el minuto 37, Alfaro fue expulsado por agredir a un jugador del Ilicitano.

Lejos de parapetarse atrás y salir al contragolpe, los alcoyanos se hicieron momentáneamente con la manija y encerraron en su meta a los franjiverdes durante los primeros compases de la reanudación. En el 75 llegó la recompensa a su asedio cuando Rubio aprovechó una asistencia desde el flanco derecho para poner las tablas en el marcador. El Ilicitano no supo cómo digerir el golpe encajado y tuvo algunos minutos de incertidumbre.

El hecho de jugar con uno menos e irse arriba hacia la victoria terminó pasándole factura al cuadro visitante, ya que dejaron espacios atrás que Liberto, el juvenil del Ilicitano, aprovechó la confianza de Mir para echar mano de su velocidad para desequilibrar la zaga alcoyana. El contragolpe que montó el juvenil terminó con un disparo potente suyo que Devesa intentó despejar con la fortuna para los franjiverde que su rechace terminó colándose en la meta de Diego García para romper la mala dinámica de los ilicitanos.