Plagas, esculturas oxidadas y zonas de juegos cerradas en el Jardín del Turia
El PSPV denuncia la inacción del gobierno municipal de María José Catalá y Vox, al que acusa de «mirar hacia otro lado»
Erika Manso Casillas
Valencia
Martes, 26 de agosto 2025, 16:09
El Jardín del Turia, el pulmón verde de Valencia, atraviesa por un preocupante proceso de degradación marcado por la expansión de plagas en su arbolado, el deterioro de esculturas y fuentes, y el cierre prolongado de las zonas infantiles. Así lo ha denunciado la concejala socialista Nuria Llopis, que ha afeado al gobierno municipal de María José Catalá su inacción. Además, la edil ha acusado este martes a PP y Vox de «mirar hacia otro lado» mientras el parque pierde valor ambiental, cultural y social.
Tras recorrer distintos tramos del cauce, Llopis ha destacado que ejemplares como olmos de Siberia, cipreses de los pantanos, moreras o ficus benjamina sufren infecciones que amenazan con propagarse, como ya ocurrió con los pinos de la plaza Hermanos Bécquer, en Orriols, afectados por una bacteria que seca sus ramas. El problema principal no solo se ha limitado a su vegetación: varias fuentes se encuentran inactivas y esculturas emblemáticas, como las que se sitúan bajo el Museo de Bellas Artes San Pío V, muestran graves signos de oxidación.
A esta situación se suma el cierre de varias áreas de juegos infantiles. Llopis considera especialmente grave que, con la vuelta al colegio y el regreso de las familias a los espacios urbanos, «los parques sigan cerrados por incompetencia de Catalá», afirma Llopis.
La edil ha puesto el foco también en el monumento El Principio del Fin del Cáncer de Útero, formado por 16 columnas de cinco metros de altura con 25.600 nombres grabados, que en muchos casos ya no pueden leerse por el deterioro de la obra.
La concejala ha reprochado que la única medida anunciada hasta ahora por el bipartito respecto al cauce haya sido la creación de «estanques antipobres» para evitar que personas sin techo se instalen bajo los puentes, en lugar de invertir en la conservación de un espacio que forma parte de la identidad de Valencia.
Por ello, ha emplazado al gobierno municipal a abandonar su «negacionismo climático» y activar de inmediato el plan director del Jardín del Turia, un documento que permanece guardado en un cajón pese a su importancia para garantizar la salud de los árboles, renovar infraestructuras y revitalizar un enclave fundamental. «Es una pena que la Capitalidad Verde Europea no haya servido para impulsar actuaciones de calado en el jardín. Es una muestra más de que Catalá no tiene proyecto para Valencia», ha sentenciado Llopis.