Un informe psiquiátrico, el próximo paso en la investigación al presunto pirómano de El Saler
La pericial pretende dictaminar el estado de salud del letrado y si este le puede eximir o reducir su responsabilidad penal en los incendios
La investigación sobre los incendios del Saler se encuentra en una fase intermedia. El juzgado ya dispone de los primeros atestados de la Guardia Civil ... acerca de los fuegos del Saler, los primeros del mes de octubre, pero también los últimos sucesos de febrero. El único investigado hasta el momento, de profesión abogado, se ha acogido su derecho a guardar silencio. Anteriormente sí hizo una declaración en la que rechazaba las acusaciones. Ante los medios de comunicación, en cambio, opta habitualmente por el silencio.
Las indagaciones se concentran en Instrucción 7 de Valencia, el órgano donde se investiga la autoría de los fuegos. Una de las próximas diligencias será el encargo de una pericial psiquiátrica del imputado. Se trata de una prueba que barajan pedir tanto desde el ministerio fiscal como la propia defensa.
El resultado será, de hecho, determinante. El objetivo de esta pericial será conocer su estado psicológico, si es plenamente consciente de la acción que está llevando a cabo cuando supuestamente prende fuego al parque natural. Si lo pide la Fiscalía, el informe corresponde al forense del Instituto de Medicina Legal, un profesional independiente.
La defensa puede, no obstante, encargar su propia pericial a un especialista y que esta sea ratificada o no por el perito del IML.
Esta será, sin duda, una de las cuestiones clave en un eventual juicio. No sólo para la defensa sino también para la acusación a la hora de elaborar un hipotético escrito de acusación. Dependiendo del resultado del dictamen, se podría plantear una atenuante, una rebaja de la pena prevista inicialmente para un delito de estas características, o incluso en el mayor de los grados una eximente, lo que haría que el castigo quedara en la imposición de una medida de seguridad, por ejemplo un internamiento o tratamiento psiquiátrico, aunque debería asumir el coste de la responsabilidad civil. No es la primera vez que se produce un caso de estas características.
Alrededor de este asunto se ha generado una preocupación vecinal -existe el riesgo de un nuevo desastre ecológico, pero también un peligro de la integridad personal de los residentes- pero también cierta presión política con declaraciones de, entre otros, la alcaldesa de Valencia. Esto, según fuentes judiciales, genera un clima que puede llevar a conclusiones precipitadas por parte de los investigadores.
La pericial busca saber si es consciente de la acción que está llevando a cabo cuando supuestamente prende fuego al parque natural
Estas diligencias, las de Instrucción 7 de Valencia, son las más delicadas para el futuro judicial del principal investigado. Pero no son las únicas. El juzgado de Instrucción 16 ya ha trasladado a un juzgado de lo Penal el supuesto quebrantamiento de la orden de alejamiento del parque natural. El acusado se negó a admitir los hechos en la guardia del miércoles. Una confesión en este sentido puede comprometer su línea de defensa en el otro procedimiento. La Fiscalía reclama para él 2.700 euros de multa. No hay fecha todavía para el juicio.
La sospecha de la parafina
Los agentes del Seprona de la Guardia Civil esperan aún un informe que puede ser determinante a la hora de fijar la posible responsabilidad del investigado en los últimos incendios acaecidos en El Saler. Los especialistas de la Benemérita aguardan todavía el análisis que debe llegar desde Madrid para determinar si, en el origen del fuego, hay o no presencia de sustancias acelerantes.
No es solo eso. Uno de los objetivos del informe que se está realizando es comprobar si hay parafina entre las posibles sustancias que iniciaron alguno de los dos siniestros detectados el 11 y el 12 de febrero. Nada ha determinado aún que las haya. Ese es el objetivo de esta diligencia.
La Guardia Civil aguarda todavía el análisis de Madrid para determinar si en el origen del fuego hay o no acelerantes
Los agentes, tras sofocar el fuego los bomberos, tomaron muestras del punto en el que se habían iniciado las llamas. Este material fue enviado a especialistas de Madrid para comprobar la posible presencia de acelerantes en el siniestro. No es una cuestión baladí. Como ya informó LAS PROVINCIAS, días después del último de los fuegos, los agentes intervinieron a los pies de edificio del sospechoso una garrafa vacía de parafina. Al mismo tiempo, los vecinos de El Saler tomaron una fotografía del ahora desterrado del parque natural en la que se le podía ver llevando en su mano derecha una garrafa con dicho material. Los residentes aseguran que la compró antes de los incendios. El letrado dice que después. Eso también debe certificarlo la investigación de la Guardia Civil.
El abogado ha negado su relación con los incendios y alegó que la parafina la había comprado para una estufa. El informe debe determinar si la parafina está presente en el foco de inicio del siniestro. Una vez confirmada o descartada esta circunstancia, llegaría el siguiente paso en caso de resultado positivo: indagar si dicho producto inflamable está relacionado o no con el que adquirió el presunto pirómano.
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