Las películas amadas
Cinéfilos valencianos con alto nivel de exigencia eligen cinco de sus filmes preferidos. Abundan el amor, la fantasía y el terror
Jueves, 9 de octubre 2025, 23:52
La propuesta fue disciplinadamente aceptada por varios exigentes cinéfilos valencianos: les invité a elegir cinco de sus películas más amadas, precisando que no había que nombrarlas necesariamente por orden de preferencia (eso suele crear dilemas irresolubles). Tampoco era obligado hacerlo por orden cronológico. Bastaba con citarlos tal cual llegaban a sus mentes imágenes y el título de esos filmes. Hubo otra petición: a los cinéfilos encuestados se les solicitó que describiesen las películas elegidas con solo una, dos o tres palabras. No más. El laconismo les obligó a una radical brevedad descriptiva. Todos cumplieron esa norma, que en modo alguno era caprichosa: el espacio periodístico tiene sus límites. Al menos en la edición en papel.
María García-Lliberós (escritora): 'Senderos de gloria' (Stanley Kubrick, 1957), Antimilitarista; 'El padrino I'. La Mafia, retratada; 'Con la muerte en los talones' (Alfred Hitchcock, 1959), Acción, Intriga, humor; 'Charada' (Stanley Donen, 1962), Ingeniosa y divertida; 'Secretos de un matrimonio' (Ingmar Bergman, 1973), Vida en pareja.
José Perdiguero (ajedrecista y conductor de la EMT). 'Lo que el viento se llevó' (Victor Fleming, 1939): La Película. 'El último samurai' (Edward Zwick, 2003): Identificativa; 'El Padrino I' (Ford Coppola, 1972): Reflexiva. 'El Padrino II' (Coppola, 1974): Descorazonadora: 'Rocky 3' (Sylvester Stallone, 1982): 'Motivadora'.
Concha Ridaura (técnica de exposiciones temporales). 'Con faldas y a lo loco' (Billy Wilder, 1959): Diversidad, aceptación. 'Brubaker' (Stuart Rosenberg, 1980), Solidaridad y justicia; 'Carros de fuego' (Hugh Hudson, 1981), Compañerismo, igualdad; 'Cinema Paradiso' (Giuseppe Tornatore, 1999), Nostalgia y amor; 'Gladiator' (Ridley Scott, 2000), Liderazgo y determinación.
Carlos Pajuelo de Arcos (periodista): 'Drácula, de Bram Stoker' (Coppola, 1992), Inquietante e inesperada; 'El fantasma de la ópera' (Joel Schumacher, 2004), Oscura y posible; 'Un hombre lobo en París' (Anthony Waller, 1997); Terrorífica y futurible; 'América, América' (Elia Kazan, 1963), Ambiciosa, la huida; 'Uno de los nuestros' (Martin Scorsese, 1990), Hermandad criminal.
Constanza Soriano (pintora): 'Amor' (Michael Haneke, 2012), Preciosa y desgarradora; 'La juventud' (Paolo Sorrentino, 2015), Contemplativa y melancólica; 'Deseando amar' (Wong Kar-wai, 2000), Poética y elegante; 'El hijo', (Jean-Pierre Dardenne, 2002), Sobria y punzante; 'La gran belleza' (2013, Sorrentino), Onírica y decadente.
Ricardo Gil Romaguera (pintor): 'Los puentes de Madison' (Clint Eastwood,1995), Amor fugaz, profundo; 'Las noches de Cabiria' (Federico Fellini, 1957): Fe y esperanza; 'Calle Mayor' (Juan Antonio Bardem, 1956), Vacío moral; 'Los santos inocentes' (Mario Camus, 1984), Poder y humillación; 'La lengua de las mariposas' (José Luis Cuerda, 1999) Supervivencia.
Sarah Pérez (periodista y comisaria de arte): 'El Mago de Oz' (Victor Fleming, 1939), Un mundo fantasioso; 'La dolce vita' (Fellini, 1960), Claroscuros italianos; 'Memorias de África' (Sydney Pollack, 1986), Hermosísima naturaleza; 'Los pájaros' (Hitchcock, 1963), Inesperada revolución; 'Desayuno con diamantes' (Blake Edwards, 1961), El mejor Hollywood.
Rafa Marí (periodista). '2001', una odisea del espacio' (Kubrick, 1968), Misterios del Universo; 'King Kong' (Merian C. Cooper, Ernest B. Schoedsack, 1933), Un Amor Enorme; 'La invasión de los ladrones de cuerpos' (Don Siegel, 1956), Estremecedora ¿fantasía?; 'Drácula' (Terence Fisher, 1958), Aterrador Christopher Lee; 'El increíble hombre menguante' (Jack Arnold, 1957), ¡Menuda pesadilla!
'Con faldas y a lo loco'
Sentado en mi cómoda butaca ante la tele medité durante un buen rato (3 minutos) qué película poner en el reproductor de entre las citadas en esta encuesta. Tras dudar durante bastante tiempo (2 minutos), opté por revisar 'Con faldas y a lo loco'.
He visto unas diez veces la película de Billy Wilder y sigue inyectándome en cada nueva ocasión una apreciable dosis de vitalidad.