Borrar
Urgente El precio de la luz sigue a la baja este Viernes Santo: las horas que costará menos de 1 euro
Un agente de la Guardia Civil de Tráfico detiene a los vehículos en un control de carretera. LP

La DGT desvela todos los motivos por los que pueden inmovilizarte el coche

El organismo recuerda las razones por las que los agentes pueden prohibirte la conducción de tu vehículo

LAS PROVINCIAS

Viernes, 24 de enero 2020, 20:17

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

La Dirección General de Tráfico (DGT) ha recordado todos los motivos por los que los agentes pueden inmovilizar tu vehículo en la carretera. Hay infracciones graves que además de una sanción económica pueden suponer la prohibición de retomar la conducción del automóvil, por lo que es especialmente importante tener claro cuáles son para evitar esta medida.

A causas más conocidas como conducir bajo los efectos del alcohol o las drogas, se le añaden algunas que no todos los conductores tienen presente. Por ejemplo, todos los coches en los que viaje un niño y no dispongan del sistema de retención infantil obligatorio también pueden ser inmovilizados. La retención de un vehículo puede producirse en el lugar que indiquen los agentes y los gastos correrán por cuenta del conductor.

En otros casos, como en los de vehículos que circulan con dispositivos para eludir radares, con los elementos de control manipulados o que generan demesiadas emisiones, se tarda más en levantar la inmovilización. Con estas circunstancias, el coche sólo podrá volver a circular cuando un taller designado por los agentes certifique la desaparición de la manipulación o sistema o cuando se dejen de superar los niveles máximos.

Estos son todas las razones por las que te pueden inmovilizar el vehículo:

- Circular sin sillita.

- Conducir bajo los efectos del alcohol o las drogas, y cuando no haya otro conductor en el coche que esté en conduciones de coger el vehículo.

- Ponerse al volante de un vehículo sin autorización administrativa para circular.

- No llevar casco, tanto el conducor como el pasajero de la moto.

- Circular con un vehículo que no esté asegurado o cuya póliza no se encuentre en vigor.

- Llevar un exceso de pasajeros en el vehículo y exceder el número de plazas autorizadas del coche.

- Tener deficiencias en el vehículo que supongan un riesgo para los demás: conducir sin frenos, faros, con golpes muy graves o sin la ITV.

- Estar demasiadas horas al volante e incumplir los tiempos de conducción y descanso.

- Superar los niveles de emisión de gases, humos y ruido permitidos para cada vehículo.

- Manipular los dispositivos de control, como el tacógrafo o el limitador de velocidad.

- Llevar antiradares (inhibidores o detectores) en el vehículo para eludir los mecanismos de vigilancia de Tráfico.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios