El conflicto por el desalojo de los menores de un avión en Manises alcanza a Estados Unidos
El Centro Nacional de Defensa Judía estudia acciones legales
Manuel García
Valencia
Lunes, 28 de julio 2025
Varias organizaciones como ACOM (Acción y Comunicación sobre Oriente Medio) - Madrid, España . National Jewish Advocacy Center - Estados Unidos . Organisation Juive Européenne (OJE) - París, Francia han expresado su «profunda preocupación» ante los hechos ocurridos el 23 de julio de 2025 en el aeropuerto de Valencia, donde 44 menores franceses «fueron expulsados de un avión por el piloto tras ser identificados como judíos y su joven monitora reducida y detenida por la policía de un modo violento y absolutamente desproporcionado».
Según un comunicado, apuntan a que las primeras evidencias y testimonios recopilados de testigos directos indican que podría tratarse «de un acto de discriminación antisemita contra niños y jóvenes menores, por lo que nos encontramos recopilando y analizando todas la pruebas para actuar por todas las vías legales disponibles, con el fin de defender los derechos civiles y de protección de esos menores y para garantizar que este grave incidente no quede impune».
Aseguran que se basan en una evaluación preliminar de testimonios «que consideramos creíbles y que continuamos verificando, los hechos se desarrollaron de la siguiente manera: El 23 de julio de 2025, un grupo de 44 menores judíos franceses de entre 13 y 17 años, pertenecientes al campamento Kineret, fueron desalojados del vuelo VY8166 de Vueling con destino París-Orly. Los hechos son corroborados por múltiples testimonios, incluyendo por pasajeros que nada tenían que ver con el grupo, y describen una actuación desproporcionada, injustificada y excepcional: 44 menores fueron desalojados de la aeronave sin ninguna explicación válida por orden del capitán. Estos niños, supervisados por ocho jóvenes adultos, acababan de finalizar un campamento y estaban sentados en sus asientos, respetando las normas y al personal. No se reportaron incidentes, amenazas ni comportamiento inapropiado».
Por el contrario, insisten en que varios pasajeros independientes en el avión «escribieron declaraciones confirmando que los niños no representaban ninguna amenaza para el orden público o la seguridad del vuelo. La respuesta arbitraria y excesiva de la tripulación fue seguida de la intervención violenta de la Guardia Civil, que culminó con el arresto del modo más abusivo de la directora del grupo, de 21 años, ante la mirada traumatizada de los menores. Los adolescentes fueron retenidos durante horas, obligados de modo irregular a borrar los vídeos que habían grabado del incidente y finalmente abandonados por la compañía aérea sin alternativa de vuelo. Los menores regresaron a sus hogares al día siguiente tras recibir el apoyo para su realojo de grupos y comunidades judías y conmocionados tras presenciar estos actos de violencia y abuso institucional».
Considedan que agravando aún más la situación, «en lugar de abrir una investigación imparcial, la compañía Vueling lanzó un comunicado injurioso que, sin mencionar intención alguna de aclarar los hechos, calumnió a estos menores acusándolos de 'comportamiento conflictivo' y 'actitud violenta'. Esta respuesta irresponsable ha alimentado una campaña de injurias en redes sociales contra menores judíos, con acusaciones sin fundamento que incluyen supuestos cánticos contra palestinos y manipulación de equipos de seguridad. Todas estas aseveraciones sobre un comportamiento atribuido a todos y cada uno de los miembros del grupo emitidas sin prueba alguna constituirían una difamación que acarrearía graves consecuencias».
Consideran «particularmente grave que una aerolínea conocida por transportar a pasajeros vacacionales, algunos altísimamente conflictivos y con comportamientos agresivos o descontrolados sin consecuencia alguna, se cebe tan mezquinamente con unos menores y que su piloto decida adoptar medidas tan extraordinarias sin consecuencias. Todo ello ha provocado una ola de indignación internacional que vuelve a cuestionar el sesgo y el odio contra los judíos ejecutados por personas, instituciones y autoridades en España ante la inacción, cuando no la connivencia, del gobierno, que no ha expresado ningún tipo de preocupación, ni ha abierto investigación alguna del incidente».
Ante la «gravedad de estos hechos que involucran menores franceses en territorio español, perpetrados por una compañía con base en España y fuerzas de seguridad españolas contra menores judíos, anunciamos que nuestras organizaciones iniciarán de forma coordinada las acciones legales más contundentes disponibles tanto en el ámbito nacional como internacional y que pueden afectar al comandante de la nave y su tripulación, a la compañía aérea y a su compañía matriz (IAG que, con accionariado catarí, posee también British Airways e Iberia), a los policías que actuaron con fuerza excesiva, a sus mandos, a las autoridades aeroportuarias y de transportes en España y a todos aquellos que compartan la responsabilidad en este tan lamentable acto de abuso contra chicos judíos».
