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El líder cubano Fidel Castro.
Fidel Castro muere en La Habana a los 90 años

Fidel Castro muere en La Habana a los 90 años

La última vez que el líder cubano acudió a un acto público fue el pasado 13 de agosto, con motivo de su cumpleaños

colpisa

Sábado, 26 de noviembre 2016, 07:12

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El líder cubano Fidel Castro ha muerto a los 90 años, según ha confirmado su hermano, el presidente Raúl Castro, en un comunicado que ha leído en la televisión estatal. "Con profundo dolor comparezco para informarle a nuestro pueblo, a los amigos de nuestra América y del mundo que hoy 25 de noviembre del 2016, a las 10.29 horas de la noche falleció el comandante en jefe de la Revolución cubana Fidel Castro Ruz", ha indicado Raúl Castro con voz firme, aunque visiblemente emocionado y en su tradicional atuendo militar.

El mandatario ha agregado que los restos del líder histórico de la Revolución cubana serán cremados según su "voluntad expresa" y que en las próximas horas se ofrecerá al pueblo "información detallada sobre la organización del homenaje póstumo que se le tributará".

Las últimas imágenes de Fidel Castro son del pasado 15 de noviembre, cuando recibió en su residencia al presidente de Vietnam, Tran Dai Quang; y la última vez que se le vio en un acto público fue el pasado 13 de agosto, con motivo de su 90 cumpleaños en un acto en el teatro Karl Marx de La Habana.

Cuba declara nueve días de duelo

  • El Consejo de Estado de la República de Cuba ha anunciado que el protocolo funeral por el líder cubano Fidel Castro comenzará el próximo lunes, en el marco de nueve días de luto nacional -a partir de las 06.00 del 26 de noviembre hasta las 12.00 horas del 4 de diciembre (todas hora local)-, día en el que tendrá lugar la ceremonia de inhumación en el cementerio de Santa Ifigenia.

  • "Durante la vigencia del Duelo Nacional cesarán las actividades y espectáculos públicos, ondeará la enseña nacional a media asta en los edificios públicos y establecimientos militares", ha anunciado la Comisión Organizadora del Comité Central del Partido, el Estado y el Gobierno de Cuba en un comunicado.

  • El lunes, a las 19 00 horas, se realizará un "acto de masas" en la Plaza de la Revolución José Martí de la capital y al día siguiente "se iniciará el traslado de sus cenizas por el itinerario que rememora La Caravana de la Libertad en enero de 1959, hasta la provincia de Santiago de Cuba, ruta que terminará el día 3 de diciembre.

  • La ceremonia de inhumación se efectuará a las 07.00 del día 4 de diciembre en el cementerio de Santa Ifigenia.

En esa ocasión se pudo observar a Castro con un aspecto frágil, vestido con un chándal blanco y flanqueado por su hermano Raúl y el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro.

«A todos nos llega nuestro turno»

Desde su cumpleaños recibió también en su domicilio a otros mandatarios como el presidente de Irán, Hasán Rohaní; el de Portugal, Marcelo Rebelo de Sousa; o los primeros ministros de Japón, Shinzo Abe; de China, Li Keqiang, y Argelia, Abdelmalek Sellal.

En abril, en el XVII Congreso del Partido Comunista de Cuba, Fidel Castro también reapareció y pronunció un discurso que sonó a despedida y en el que reafirmó la fortaleza de las ideas de los comunistas.

"A todos nos llegará nuestro turno, pero quedarán las ideas de los comunistas cubanos, como prueba de que en este planeta si se trabaja con fervor y dignidad, se pueden producir los bienes materiales y culturales que los seres humanos necesitan, y debemos luchar sin tregua para obtenerlos", afirmó Castro en esa ocasión.

Sus últimos años

Retirado del poder desde 2006, Fidel Castro pasó sus últimos años entre la convalecencia por su enfermedad, esporádicas apariciones, duros momentos por la muerte de amigos como Hugo Chávez o Gabriel García Márquez e históricos acontecimientos como el "deshielo" entre Cuba y EE UU.

La grave dolencia intestinal que el mismo Fidel Castro declaró secreto de estado y que llegó a ponerle entre la vida y la muerte convirtió al "comandante en jefe" de la Revolución cubana en un "soldado de las ideas" que cambió su legendario uniforme verde olivo por la indumentaria deportiva con la que se le ha visto en sus años de jubilación.

Con su inédita proclama del 31 de julio de 2006, el líder cubano delegó las riendas del país en su hermano Raúl y comenzó una larga convalecencia que le mantuvo completamente apartado de la vida pública durante cuatro años, en los que no faltaron constantes especulaciones sobre su estado de salud.

Para sorpresa de propios y extraños, Fidel comenzó a reaparecer en 2010 en algunos actos públicos, en una especie de "resurrección" donde emprendió una particular "cruzada" sobre peligros para el planeta como una eventual guerra nuclear, el cambio climático o el problema alimentario.

Congreso del Partido Comunista de Cuba

Muy significativa fue su presencia, en abril de 2011, en la clausura del VI Congreso del Partido Comunista de Cuba (PCC) donde su hermano Raúl le sustituyó como primer secretario al frente de la organización, con lo que se completó el traspaso de poderes iniciado cinco años antes.

Además de ser testigo excepcional de su propia sucesión, Fidel Castro asistió desde el retiro a las reformas para "actualizar" el socialismo cubano, un proceso que abrió tímidamente las puertas a la iniciativa privada y que acabó con históricas prohibiciones que él mantuvo durante más de medio siglo como los viajes al extranjero o la compraventa de viviendas o coches entre particulares.

También sufrió en los últimos tiempos la perdida de grandes amigos, en especial la del presidente venezolano Hugo Chávez, el principal socio de la isla en el siglo XXI y fallecido el 5 de marzo de 2013 a los 58 años tras una larga batalla contra el cáncer.

Un aspecto frágil

En las imágenes que de él se divulgaron en los últimos años se podía ver a un anciano Fidel de aspecto frágil, casi siempre sentado, con voz débil aunque animado y mucho más delgado que en sus épocas de esplendor. Durante su largo mandato, la salud de Fidel Castro fue uno de los secretos mejores guardados de un país cuyos ciudadanos nada o muy poco supieron durante más de medio siglo de sus dolencias, salvo las que él mismo se encargaba de explicar con detalle.

En sus mejores tiempos, Fidel, amante de los deportes desde la infancia, presumía de forma física y durante años se burló de los frecuentes rumores que circulaban sobre todo tipo de enfermedades e incluso sobre su muerte. Sobre la enfermedad que le obligó a delegar nada se explicó oficialmente, aunque la tesis más extendida es que sufrió una "diverticulitis" derivada en peritonitis después de tres operaciones fallidas.

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