El Valencia y la Agrupación de Peñas, listos para firmar el convenio seis años después

Se pondrá con este paso fin a la guerra que han mantenido el colectivo de peñas con Meriton después de que en 2020 Anil Murthy les expulsara de la sede que tenían en el bajo de Mestalla. En realidad, eso fue la drástica medida que decidió tomar el presidente de la entidad después de que las peñas alzaran la voz y exigieran por un lado una política más correcta de Meriton y otro el relevo en la presidencia. Murthy montó en cólera y la revancha se la tomó mandando un escrito a la Agrupación invitándoles a salir del local.

Se rompieron totalmente relaciones. Había caducado el convenio suscrito en 2018 cuya duración era de dos años. Desde entonces, se pasó a una posición más agresiva de la Agrupación hasta el punto de ser Fede Sagreras, su presidente, parte activa de la plataforma que impulsó la Tertulia Torino y que se denominó De Torino a Mestalla. Pero el camino poco a poco fue adquiriendo diversos giros que han provocado que finalmente la Agrupación haya vuelto a sentarse con el club hasta el punto de tener listo ya el borrador definitivo.

La desaparición de De Torino a Mestalla prácticamente coincidió con la idea de Fede Sagreras de hacer una consulta a las peñas y decidir así qué se iba a hacer a partir de ese momento: si mantenerse en una posición frontal a Peter Lim o enterrar el hacha de guerra y entablar conversaciones para tratar de recuperar los convenios. Una consulta previa a las peñas y una votación el pasado 7 de junio trajo la respuesta definitiva: 161 peñas votaron a favor de que la Agrupación hablara de nuevo con el club, con 48 peñas oponiéndose a ello. De las 282 censadas, votaron 209, lo que -aunque también fue objeto de críticas- dio ya plena libertad y el espaldarazo definitivo para que Sagreras cambiara el rumbo de los acontecimientos.

Desde junio se han ido sucediendo las reuniones entre Agrupación y Valencia. Había que perfilar temas que siempre han provocado cierta controversia entre las peñas, como por ejemplo el derecho de los peñistas a poder acceder a entradas en caso de que el equipo dispute una final, como ocurrió en la última de La Cartuja, cuando no tuvieron ningún privilegio. Desde hace muchos años tampoco se produce ninguna visita de los jugadores a las peñas, un aspecto que también estrecha de alguna manera la vinculación de lo aficionados con sus ídolos. La 'bunkerización' y el alejamiento de los futbolistas es más que evidente, aunque el club provoca ciertas iniciativas como por ejemplo la firma que la semana pasada protagonizaron Pepelu y Jaume, por ejemplo, en la inauguración de la tienda oficial. Otra cuestión que también se puede contemplar para el futuro es la posibilidad de que la Agrupación tenga en el estadio de Cortes Valencianas un espacio.

Ambas partes se resisten a dar aunque sea formalmente el acuerdo por cerrado, sobre todo porque falta la firma definitiva y tratándose de Meriton siempre hay que mantener ciertas reservas. Desde luego, si como parece se lleva a cabo finalmente, el Valencia habrá extendido su protección a tres colectivos significativos. Por un lado la Asociación de jugadores que preside Fernando Giner, por otro la Asociación del Pequeño Accionista que dirige Vicente Vallés y ahora la Agrupación de Fede Sagreras, que trata de mantener un arriesgado y criticado equilibrio entre el malestar de los aficionados con Meriton, dando libertad a las peñas para que se manifiesten si así lo creen conveniente, y ese convenio que está a punto de rubricarse.

Hay que tener en cuenta que no fueron pocas las peñas que decidieron mostrar incluso públicamente su disconformidad con la línea adoptada por la junta directiva que preside Sagreras. Por eso, algunas se aliaron formando el Col.lectiu de Penyes Valencianistes, sin mucho empuje todo hay que decirlo.