

Secciones
Servicios
Destacamos
Abelardo, Jesús Martínez, Antón, Aníbal, Claramunt, Sol, Sergio, Paquito, Forment, Pellicer, Valdez, Tatono, Claramunt II, Jesús Martínez, Poli, Vidagany, Ansola, Barrachina, Fuertes, Uriarte, ... Nebot, Jara, Cota y Pesudo. Una plantilla de lujo para un Valencia grande, el de 1971 que conquistó el título de Liga que este mismo viernes celebra su 54 aniversario. Muchos de los aficionados que acuden hoy a Mestalla conocen de oídas algunos de esos nombres anteriormente expuestos pero también los hay veteranos o amantes de la historia que recuerdan que este grupo de jugadores que estaban liderados desde el banquillo por Alfredo Di Stéfano.
Hoy, con un Valencia demasiado agitado y con un máximo accionista que vive en Singapur y con un presidente que todavía no ha pisado el estadio de Mestalla en un partido desde que tomó el cargo (Kiat Lim), el escenario no tiene nada que ver con la cordura que llegó a poner en su mandado Julio de Miguel, ligado estrechamente también al que por entonces era el gerente del club Vicente Peris. Ellos en la dirección del club, Di Stéfano desde el banquillo y con Paquito y Claramunt marcando la pauta desde el césped, el Valencia fue capaz de conquistar el cuarto título de Liga de su historia. Llegó la recompensa del éxito después de que pasaran 24 años desde el último campeonato que el Valencia fue capaz de conquistar en 1947.
Hasta en 17 partidos fue capaz de mantener Abelardo su portería a cero, un logro que impresiona se mire por donde se mire. Eran tiempos en los que el Valencia brillaba con ese apelativo de bronco y copero que tristemente ha ido perdiéndose en los tiempos actuales. Fue esa temporada en la que se creó cierta inquietud porque el técnico argentino había prescindido de tres con muchísimo peso en el valencianismo. Hablamos de Vicente Guillot, Roberto Gil y Waldo, tres nombres inolvidables en la historia blanquinegra.
Noticia relacionada
Ese campeonato fue el de Sarriá, partido en el que Di Stéfano y todo el valencianismo estuvo en vilo pendiente del resultado de Atlético y Barcelona (1-1). Empate, pese a la derrota del Valencia en Sarrià contra el Espanyol (1-0), permitía al Valencia proclamarse campeón de Liga. Fueron decisivos dos partidos consecutivos ganados in extremis. El primero fue en Mestalla por 2-1 al Celta con gol de Forment, que se adelantó en el primer palo para cabecear un saque de esquina botado por Sergio. El segundo, por 0-1 en la Creu Alta ante el Sabadell, con tanto de Antón. En el penúltimo encuentro, el Valencia derrotó al Elche en Mestalla y entonces solo dependía de sí mismo para esa última cita en Sarrià. Pero no hizo falta puntuar.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Destacados
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.