La Guardia Civil investiga la sustracción de dos embarcaciones en La Marina

Las dos embarcaciones, propiedad de La Marina, son unas lanchas de más de diez metros de eslora y que están valoradas en más de 60.000 euros. La denuncia se presentó después de que las dos neumáticas desaparecieran de su lugar de almacenaje y, después de que se supiera que se había abierto una investigación, las embarcaciones fueron localizadas y devueltas, aunque la denuncia no se ha retirado con el objetivo de saber qué ha pasado y si se tiene que depurar algún tipo de responsabilidad.

La Marina de Valencia vive unos momentos delicados con un futuro incierto. El Consorcio València 2007 está en proceso de liquidación y el Ayuntamiento todavía no ha desvelado cuál va a ser el nuevo modelo para gestionar la dársena. En estos momentos el Consistorio y la Generalitat trabajan para dotar de un nuevo modelo para la instalación, aunque esa fórmula definitiva tendrá que contar con el visto bueno de Puertos del Estado.

La entidad se ha visto salpicada en los últimos tiempos por asuntos poco claros y algunos de ellos se han tenido que resolver en los tribunales. Uno es el de la condena a la entidad para abonar a parte de sus empleados las pagas extra que no se ingresaron en ejercicios anteriores. El año pasado fueron tres trabajadores los que ganaron el juicio, y este son ocho más los que han acudido al juzgado para que el organismo cumpla con el pago de las nóminas. Las extra impagadas y que tiene que abonar La Marina ahora a los trabajadores corresponde a los ejercicios de 2020 a 2022. Este proceso sigue abierto porque hay empleados que siguen sin cobrar parte de las extras que se les adeudan.

El juzgado de lo social número 10 de Valencia emitió una sentencia por la que reconocía el derecho a tres empleados del Consorcio al cobro de varias pagas extra que no habían sido abonadas por la entidad que dirige Vicent Llorens, que recurrió la sentencia pero se encontró también con el rechazo del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana, que ratificó el abono de las cantidades adeudadas a los trabajadores. Las pagas correspondían a los ejercicios de 2018 a 2020, por lo que cada uno de los tres empleados ha recibido más de 8.000 euros. A estos tres trabajadores se sumaron otros empleados hasta llegar a la treintena.

El director general de La Marina, Vicent Llorens, que llegó al cargo de la mano del exalcalde de Valencia, Joan Ribó, en 2016, también se ha visto imputado en alguna causa por su gestión al frente del organismo. En una de ellas por el concurso del escenario fijo del recinto, una investigación que finalmente quedó archivada. Llorens también se ha visto inmerso en una situación judicial por el festival de las paellas universitarias, que fue denunciado por una empresa que no pudo organizar uno de los eventos solicitados.

Desde el Ayuntamiento de Valencia ya se ha activado el mecanismo para relevar a Llorens de su cargo y nombrar a nuevos responsables que estén al frente del nuevo modelo que se prevé para La Marina. Mientras eso sucede, la investigación sobre qué paso realmente con las embarcaciones sustraídas y posteriormente devueltas sigue en marcha con el objetivo de esclarecer un caso que se ha convertido en un misterio en una entidad donde los últimos años se caracteriza por su opacidad. En la página web, por ejemplo, se dejaron de colgar la relación de contratos menores desde 2021, cuando antes se hacía trimestralmente.