El viento deja al descubierto las señales de la fallida Zona de Bajas Emisiones de Valencia
Los carteles con la señalización de tráfico siguen pendientes de que se apruebe la ordenanza municipal
Lola Soriano Pons
Valencia
Miércoles, 26 de noviembre 2025, 15:00
No ha habido ni inauguración ni puesta en marcha, pero el viento que estos días azota a la ciudad de Valencia ha dejado al descubierto los panles informativos que el Ayuntamiento de Valencia tenía preparados para la puesta en marcha de la Zona de Bajas Emisiones de Valencia (ZBE), ordenanza que de momento no ha visto la luz porque el PP no ha contado con el apoyo ni de su socio de gobierno, Vox, por la orden negativa dada a última hora por Santiago Abascal, ni de la oposición.
El cartel, que permanecía tapado por una lona de plástico, se ha desprendido por el viento y se pueden leer las indicaciones que tenían preparadas para las zonas de circulación restringida, donde se pide a los conductores que respeten la señalización específica, se recuerda que es una ciudad 30 y que la zona está vigilada por cámaras.
La realidad es que a día de hoy las negociaciones sobre la implantación de la Zona de Bajas Emisiones está en punto muerto y si antes del 31 de diciembre no se aprueba la ordenanza, el Ayuntamiento de Valencia podría tener que devolver cerca de 135 millones de euros de ayudas al transporte y otras subvenciones.
Punto muerto de la negociación
No hay que olvidar que en el último pleno municipal, el edil de Movilidad, Jesús Carbonell, presentó una alternativa in voce de adelantar la prohibición de etiqueta A a los coches de la ciudad al 1 de julio de 2027; prohibir la etiqueta B a los coches de fuera de la ciudad en el plazo de un año a contar desde el momento en que se incumplan los umbrales de contaminación aplicables a partir de 2020 y añadió aplicar la ZBE a San Isidro, San Marcelino y el Marítimo.
Desde Vox, cumpliendo con órdenes de Abascal y pese haber avalado hasta en cinco ocasiones al PP en plenos y comisiones, no van a moverse del 'no' y desde PSPV y Compromís consideran que aplicar las primeras prohibiciones en julio de 2027, supone querer esperar a que pasen elecciones.
A todo ello se suma que el PSPV exige un corredor verde, con el bulevar García Lorca sin coches; que Compromís exige la reversión de la calle Colón (para que no pasen coches) y que el PP no ve bien la moción de la oposición de plantear multas tan pronto como en enero de 2026, ya que no se da un plazo razonable a los ciudadanos para que puedan comprar coches híbridos o eléctricos.
Uso del lenguaje
Al embrollo de la Zona de Bajas Emisiones se suma ahora la 'descoberta' del cartel que anunciaba las restricciones que todavía no se han aprobado, unos carteles al descubierto que ha criticado Compromís por incluir sólo la palabra en masculino. «El viento ha destapado las señales previstas para la Zona de Bajas Emisiones acordada entre PP y Vox que el cambio de parecer a última hora de Vox dejó como inútiles, y muestra que el bipartito ultra deja de dar la bienvenida a todas las personas que llegan a la ciudad para dirigirse solo a los hombres», indican desde Compromís.
Desde la formación naranja añaden. «Su propósito era anunciar la entrada en vigor de la ZBE que entre PP y Vox habían elaborado durante meses de común acuerdo, pero que, tras la inversión realizada incluyendo estas mismas placas, quedó paralizada por el cambio de parecer a última hora de la formación ultra de Santiago Abascal».
Y añaden que gracias a esta circunstancia «y las fotos que le han hecho llegar la ciudadanía, Compromís ha podido observar que el acuerdo entre PP y Vox roto en el descuento por la formación alcanzaba también el abandono del lenguaje inclusivo por parte del gobierno municipal, que pasaba en los carteles previos elaborados por el gobierno de Joan Ribó de dar la bienvenida a todas las personas con su 'Bienvenidas a València' a darla solo a los hombres con su 'bienvenidos'».