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Bañistas, ayer, en la playa de la Malvarrosa.

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Bañistas, ayer, en la playa de la Malvarrosa. Juanjo Monzó

Las playas reabren sin que Consell ni Ayuntamiento identifiquen el vertido

Oltra reconoce que no es sólo un problema turístico sino «una cuestión de salud pública» y Medio Ambiente intensifica las pruebas en las acequias

Lola Soriano

Valencia

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Viernes, 5 de julio 2019, 12:02

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En las playas de la Malvarrosa y de la Devesa ondea de nuevo la bandera verde, ya no está la roja que indicaba la prohibición del baño por la presencia de bacterias fecales, pero no se ha identificado el origen.

El Ayuntamiento de Valencia abrió al baño ayer las aguas afectadas el día anterior a las 12 horas, tras comprobar que los nuevos análisis no reflejaban estas bacterias y después recibir el visto bueno de la Conselleria de Medio Ambiente.

A pesar de ello, es innegable que el problema está latente, ya que es el tercer episodio que se registra en veinte días y ni el Ayuntamiento de Valencia, ni el de Alboraya y tampoco la Conselleria de Medio Ambiente han podido localizar el foco.

Conocedores de que los vertidos pueden volver a surgir, desde el Consistorio dijeron que «se coordinará con otros ayuntamientos cercanos y con Medio Ambiente para averiguar cuáles son las causas».

En Medio Ambiente explicaron que están realizando analíticas diarias y confirmaron «mediciones del emisario submarino de Vera». Indicaron que no se han detectado fisuras y descartaron que estos vertidos guarden relación con unas recientes obras de cableado submarino de internet entre Argelia y Valencia.

El director general de Aguas, Manuel Aldeguer, aclaró que «cuando desaparece la bacteria, algo que sucede rápido porque dura de 2 a 4 horas, no tiene por qué permanecer la playa cerrada». Sobre el origen, apuntó a los lugares de vertido de las acequias, por eso, están haciendo pruebas en canalizaciones de l'Horta, en el emisario de Vera y en las golas de Pujol y El Perellonet, resultados que se conocerán a partir del lunes.

La vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, advirtió que podrían deberse a «la sobresaturación de las depuradoras de Pinedo y El Saler. Dijo que «podría ser, es una cuestión muy plausible», pero no entró en especulaciones. Oltra no restó importancia a la situación y dijo que trabajan para «poner remedio». Tal como apuntó, «no es sólo una cuestión turística, es de salud pública, de seguridad de las personas que van a la playa, las que vienen de fuera y las de aquí».

Los ecologistas exigen un informe técnico de la Albufera y la zona noreste metropolitana

Los que sí urgen a que resuelva el tema son los vecinos. El portavoz de la asociación de vecinos de Nazaret, Julio Moltó, explicó que «el emisario fue una solución de emergencia de hace décadas, pero se debería de haber resuelto de otra manera. Hay un derecho al medio ambiente y no se está respetando. Hace falta voluntad política y presupuesto». Desde la asociación La Devesa, Ana Gradolí, explica que «nunca habíamos visto esta situación. Que se tomen en serio las playas y que se corrija».

Oceanógrafa

Expertos en la materia como la oceanógrafa y profesora de la Universidad Católica de Valencia, Carolina Padrón, opina que «hay que ver las verdaderas causas. No es solamente mirar las depuradoras, habría que revisar los emisarios submarinos para comprobar que no hay fisuras. Un equipo de buzos tendría que estudiar la estructura para ver si está bien o si son descargas furtivas de acequias. Y, desde luego, hay que seguir haciendo análisis diarios».

Argumenta que en la costa de Valencia hay una deriva litoral de las playas del norte hacia las del sur. Y explica que las citadas bacterias en sí no son malas, pero son indicadores de que pueda haber o no patógenos que causen enfermedades. Lucía Moreno, miembro de la comisión de Territori de Acció Ecologista-Agró, explica que estos episodios evidencian que hay un problema medioambiental real. «En la Albufera hay entrada de aguas fecales por las acequias del norte y empeora la calidad del agua. De la zona metropolitana sigue habiendo aportes fecales». Por eso, dijo que es el momento de «exigir un informe técnico para comprobar si hay veces que no van las depuradores y vierten en el emisario». También pide que las analíticas sean diarias.

Desde el Partido Popular criticaron que «ni Compromís ni PSPV salen a dar explicaciones. Ya no vale decir que la culpa es del municipio vecino. Para que el litoral esté listo en verano, los deberes se hacen en invierno», según la portavoz María José Catalá. El concejal de Ciudadanos Javier Copoví opinó que «a las playas de Valencia les pasa lo mismo que a la ciudad en general, que nadie responde por ellas. El Ayuntamiento tiene que solucionarlo porque es un problema de salud pública y, además, están dando una mala imagen». Anunció que pedirán explicaciones sobre el estado del emisario submarino de Vera. En Vox, el portavoz Pepe Gozálbez, dijo que «en plena campaña estival no nos podemos permitir que haya tres episodios de vertidos y cierres, deberían de esforzarse».

Regeneración de El Saler

Por otro lado, cabe destacar que ayer el Ministerio de Transición Ecológica apuntó que pondrá en marcha un proyecto de regeneración de las playas de l'Arbre del Gos, El Saler y la Garrofera para regenerar 360.000 metros cuadrados de playa seca y recuperar la línea de costa de 1965. Se realiza la actuación para evitar una afección al parque de La Albufera y la Devesa y el presupuesto es de 28,5 millones. Se actuará en 7.100 metros de playa entre el último espigón de Pinedo y la gola de Pujol. La arena se extraerá de Sueca, concretamente de la zona de Marenys a 65 metros de profundidad.

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