El Besamanos se inicia con la amenaza de lluvia en Valencia

La amenaza de lluvia estás siendo desde primera hora de la mañana la nota dominante en el Besamanos a la Virgen de los Desamparados, que ha empezado con escasa afluencia de público y un gran dispositivo de voluntarios y policías locales en la Plaza de la Virgen.

Hasta que pase el último de los fieles, las puertas del templo mariano permanecerán abiertas como marca la tradición de este acto de fervor. Desde la Basílica de la Virgen hasta el extremo oeste de la plaza se ha dispuesto un recorrido serpenteante de vallas para facilitar las colas que se produzcan a lo largo de la jornada.

Este año debido a las restricciones por la pandemia sanitaria no se puede tocar la imagen de la Mare de Deu, por lo que los asistentes a este acto hacen una reverencia dentro del templo mientras los voluntarios vigilan que todo se desarrolle sin ningún incidente.

La primera persona de la cola, Ana Isabel Gómez de Borbotó, ha llegado a las 4:45, mientras que los siguientes han hecho acto de presencia a las 5:55

Para cumplir con el protocolo Covid-19, los fieles deberán llevar mascarilla, guardar distancia de seguridad y se tomará la temperatura antes del pase reverencial ante la imagen que no se podrá besar.

Según el presidente de los Seguidores de la Virgen, José Luis Albiach, los voluntarios «estaremos pendientes de la distancia y de las medidas».

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