Los dos homicidas de Favara ingresan en prisión por matar a cuchilladas a su víctima

El móvil del crimen fue un asunto machista al acudir la víctima, junto a un amigo, también herido y que fue detenido por participar en la reyerta, para ajustar cuentas por unos presuntos malos tratos del ahora encarcelado a una prima del fallecido. Según el entorno de la víctima, José L. G. solo pretendía hablar y no iba armado, y todo respondió a una supuesta «encerrona» por parte de sus agresores, un padre y su hijo, los dos arrestados que han ingresado en prisión provisional.

Agentes del equipo de Policía Judicial de Almussafes se hicieron cargo de la investigación del crimen y procedieron a la detención del padre, de 72 años y vecino de Tavernes de la Valldigna, así como del acompañante de la víctima, un ciudadano búlgaro de 37 años. Este último, gravemente herido por arma blanca a la altura del estómago, acudió por sus propios medios a un hospital tras huir del lugar en el BMW en el que había acudido a la cita junto a José L., tras viajar desde Gandia a Favara.

Asimismo, Ramón R. R., de 33 años e hijo del otro presunto homicida, ha permanecido ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital de Alzira hasta recibir el alta en el día de ayer. En ese mismo momento la Guardia Civil, que lo había tenido bajo vigilancia, le leyó sus derechos y procedió a su detención como presunto autor de un delito de homicidio.

Esta misma mañana el Juzgado de Instrucción número cinco de Sueca, encargado del caso, le ha tomado declaración por videoconferencia desde el centro hospitalario. El detenido se ha acogido a sus derecho de solo responder a las preguntas de su letrado.

El presunto homicida alega que salió en defensa de su padre cuando vio que José L., con el que había discutido por cuestiones relacionadas con la prima de este, le cogía del cuello y le hacía un mataleón. Sobre la navaja con la que presuntamente acuchilló a su víctima, el arrestado alega que la portaba encima, como es habitual, por su trabajo en la huerta.

El juez ha decretado su ingreso en prisión provisional por un delito de homicidio, sin perjuicio de ulterior calificación. Asimismo, el detenido ha autorizado el acceso a su teléfono móvil para que los investigadores revisen las conversaciones que mantuvo con la víctima ese día y los anteriores, donde según la familia del fallecido, ya había amenazado a José L. G.