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Guardias civiles en la calle de Bétera donde la mujer ha matado a su marido.

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Guardias civiles en la calle de Bétera donde la mujer ha matado a su marido. IRENE MARSILLA

Una mujer mata a martillazos a un hombre tras una discusión en Bétera

La Guardia Civil detiene a la autora del crimen e investiga la relación que mantenía con la víctima y el móvil de la brutal agresión

JAVIER MARTÍNEZ Y MANUEL GARCÍA

Miércoles, 22 de diciembre 2021, 11:00

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Una mujer de 52 años, Begoña C. G., mató a martillazos a un hombre este miércoles tras una discusión en su domicilio en la calle San Francisco de la localidad de Bétera. Varias patrullas de la Guardia Civil y la Policía Local acudieron con urgencia al lugar después de que los vecinos llamaran al retén de la Policía Local de Bétera y al teléfono de emergencias 112 porque habían escuchado gritos.

Los primeros agentes de la Guardia Civil que llegaron a la vivienda detuvieron a la presunta homicida tras entrar en su casa y encontrar el cadáver de Paco S., de 60 años. Un vecino llamó a la Policía Local de Bétera minutos antes de las diez de la mañana para alertar de los gritos.

Aunque en un principio los testigos creían que la mujer detenida y la víctima mantenían una relación sentimental, la Guardia Civil constató poco después que se conocían pero no convivían en el mismo domicilio. Los violentos hechos ocurrieron en la vivienda de la mujer.

Un vecino vio a Paco sobre las nueve de la mañana en el momento que entraba en la casa de Begoña, aunque se desconoce el motivo que le llevó a presentarse en el domicilio de la mujer y por qué discutieron.

Una de las hipótesis que barajan los vecinos y familiares de la víctima es que Begoña recibió una visita inesperada a primera hora de la mañana, porque Paco habría acudido a la vivienda de la presunta homicida para pedirle que le devolviera una cantidad de dinero que le habría prestado. Algunos vecinos habían visto a la víctima con Begoña en un bar de Bétera, pero afirmaron con convencimiento que no mantenían una relación de pareja.

El médico del centro de salud se desplazó al domicilio tras ser avisado por la Policía Local y confirmó el fallecimiento del hombre. El cuerpo se encontraba junto a un gran charco de sangre en la entrada de la vivienda. Los primeros guardias civiles que llegaron a la casa hallaron el martillo junto a la víctima, que presentaba varios golpes en la cabeza.

Dos guardias civiles custodiaron la entrada del domicilio en la calle San Francisco, una pequeña vía sin salida, mientras los agentes del Servicio de Criminalística de la Guardia Civil de Valencia inspeccionaban la escena del crimen. Un grupo numeroso de vecinos se congregó en la calle cuando trascendió el crimen. El cadáver fue trasladado sobre las 13 horas al Instituto de Medicina Legal de Valencia para practicarle la autopsia.

La víctima estaba jubilada, utilizaba una muleta para andar y es una persona muy querida en la localidad por su carácter afable y las donaciones que solía realizar para ayudar a las personas necesitadas, según informaron fuentes municipales. Paco fue músico y miembro durante muchos años del Centro Artístico Musical de Bétera, y antes de jubilarse, trabajaba como administrativo en una fábrica.

Problemas con el alcohol

La homicida tiene problemas de conducta, al parecer, por consumo abusivo de bebidas alcohólicas y no cuenta con antecedentes por violencia doméstica. Hace unos meses, la mujer protagonizó un incidente en Bétera y faltó al respeto a dos policías locales. Begoña tiene un hijo adolescente que vive con su padre.

La mujer no colaboró con los agentes en el momento de su detención. La rápida intervención de una patrulla de la Guardia Civil de Bétera, que tardó muy poco tiempo en llegar a la dirección indicada por los testigos, evitó que la mujer abandonara la escena del crimen. Pocos minutos después llegaron dos agentes de la Policía Local, que colaboraron con los guardias civiles para preservar las pruebas, y familiares de la víctima.

Esta muerte violenta no se considera un caso de violencia de género en las estadísticas de homicidios que aglutina el Ministerio del Interior, ya que la víctima no es una mujer. El Equipo Mujer-Menor (EMUME) de la Comandancia de la Guardia Civil de Valencia se hizo cargo de las investigaciones.

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