365 días sin Henry Alejandro

Un año sin respuestas. Para la familia de Henry Alejandro Jiménez Marín el día de Año Nuevo es un día marcado por la pena y la rabia. El rastro del joven de 20 años, que estaba afincado en Orihuela, se perdió el pasado 1 de enero de 2019 tras verse envuelto en una pelea durante una fiesta de Nochevieja a la que acudieron varios jóvenes. Pese a los indicios de que fue agredido, la Guardia Civil no ha practicado de momento ningún arresto en relación al caso. Henry Alejandro no ha sido localizado desde entonces y sus familiares y amigos se concentrarán hoy en Orihuela «para pedir que la investigación se reactive y su caso no quede en el olvido».

Así lo expresó ayer su madre, Gina Marín, en declaraciones a LAS PROVINCIAS. El caso resulta desconcertante y está envuelto en el misterio. El día 31 de diciembre de 2018, el joven acabó su jornada de trabajo y se reunió con colegas en un piso de la localidad alicantina para celebrar el cambio de año. «Pero ya nunca más volví a verlo». Tras denunciar su desaparición, supo que había sido víctima de una agresión, como ratificaron algunos testigos e imágenes grabadas con teléfono móvil. Pero hasta ahí. Ningún arresto hasta la fecha. Gina cree que fue víctima de un caso criminal tras el que alguien se deshizo de él o lo dejó muy malherido en algún lugar.