Cuatro años de prisión para el hombre que abusó de un menor en casa de Montesinos

El episodio de abusos sexuales sobre un menor acaecido en el chalé del diseñador valenciano Francis Montesinos ya tiene pronunciamiento de la Justicia. Cuatro años y medio de prisión, una orden de alejamiento de la víctima durante cinco años y el pago de una indemnización de 6.000 euros es la pena que la Audiencia impone a Carlos Alberto D. C., asistente doméstico y amigo del modisto cuando ocurrieron los hechos, durante el verano de 2013.

La sentencia también desgrana cuál fue la actitud de Montesinos la noche que se produjeron los abusos sobre el menor de 13 años (hijo de una pareja de amigos del diseñador). La víctima fue objeto de tocamientos por parte del condenado en una habitación en que la pernoctaban juntos, en la planta baja de la vivienda. El niño logró zafarse en un momento del procesado y corrió al piso superior a pedir ayuda al modisto. Montesinos lo «auxilió», según considera probado la sentencia, recriminó a su amigo lo ocurrido y le dijo que se fuera de casa, cosa que no hizo hasta el día siguiente.

El menor acabó pasando la noche en una cama de la habitación del diseñador. Sin embargo, fue el padre del niño el que denunció los hechos unas horas después, cuando Carlos Alberto confesó a la madre del menor que «se le había ido la mano con su hijo».

El episodio fue previo a la causa por presuntos abusos sexuales sobre otros dos menores abierta contra Francis Montesinos y que llevó a la detención del modisto el pasado mes de junio, tal y como informó en exclusiva LAS PROVINCIAS. La imputación sobre el modisto quedó archivada por el juzgado de Llíria un mes después, aunque la Fiscalía ha pedido a la Audiencia que reabra la investigación. La acusación pública esgrime que no se conoce el contenido de un ordenador incautado en casa del diseñador y pide la práctica de otras diligencias. La Justicia aún no se ha pronunciado sobre si procede o no retomar de nuevo el caso.

Temblando de miedo

El fiscal pedía 11 años de cárcel para el condenado al considerar lo sucedido una violación y no abusos. Pero la Audiencia rechaza que lo ocurrido fuera una agresión sexual porque el menor «accedió voluntariamente a la cama del acusado» y no ejerció «una resistencia activa». Un dictamen que choca con el contenido de los hechos probados, que señala que el niño «se hizo el dormido porque la situación le asustó muchísimo» y que llegó «a temblar del miedo que tenía».

La resolución también valora que en el piso superior al escenario de los abusos se encontraba Montesinos, «con el que el menor tiene una gran confianza, al que llega a llamar 'tío'», lo que facilitaba una «clara situación de defensa potencial» para el menor.

Tras los abusos, el diseñador espetó a su asistente doméstico: «Vete de mi casa ya». A la mañana siguiente el condenado seguía en el chalé, pero por la tarde se marchó a Portugal, de donde es natural.

La propia sentencia subraya el papel que desempeñó Montesinos para que el acusado regresara a España y se acabara entregando a la policía. En su declaración durante el juicio contra Carlos Alberto D., el modisto valenciano recordó una de las frases que dirigió a su antiguo amigo: «Tienes que entregarte a la policía. No puedes ser un cobarde. Tienes que enfrentarte a lo que has hecho y no estar fugado y huyendo toda la vida».