El retablo original de Sant Roc y Sant Francesc vuelve a casa
La obra del siglo XVII ha sido restaurada y se ha instalado en el altar mayor de la iglesia de Sant Roc de Gandia
A. Talavera
Martes, 16 de agosto 2022, 15:14
El retablo de Sant Roc y Sant Francesc ha vuelto a su casa en Gandia después de seis meses. El pasado 15 de febrero se anunció de esta obra, que en su día presidió el altar mayor del templo de Sant Roc, de propiedad municipal por ser el santo titular. Sin embargo, con el paso del tiempo había sido sustituido y ahora ocupaba el espacio de uno de los laterales del edificio.
Este martes 16 de agosto, coincidiendo con la festividad del santo, ha vuelto a colocarse en el su sitio original para darle toda la relevancia. "Recuperamos así el esplendor del altar barroco original de la iglesia de Sant Roc con el cuadro que fue pintado para presidir este espacio", ha anunciado la concejal de Patrimonio histórico, artístico y cultural, Alicia Izquierdo, quien ha acudido a seguir los trabajos de instalación acompañada del asesor del departamento, Vicent Pellicer.
La obra de Jeroni Jacint Espinosa data de la primera mitad del siglo XVII y pertenece al período del Barroco. Ésta es una de las pinturas del patrimonio de Gandia a la que nunca se le había dado ninguna importancia, por lo que tampoco se había hecho ningún estudio a su alrededor. "Hemos conseguido llegar a la pintura original. Son colores oscuros, pero son así porque se quiere dar importancia a los distintos puntos de luz", señaló hace unos meses el restaurador, Romà Calafat. Siempre se había sospechado de la valía de este retablo que finalmente, después de la restauración, se ha confirmado.
Se trata de una obra que pertenece al estilo Barroco, pero que por sus proporciones armónicas puede relacionarse también con el Renacimiento. En cuanto a la composición de la pintura es, por un lado, cerrada por la mirada entre el ángel y San Roc y, por otro lado, se encuentra la figura de Sant Francesc que mira directamente al espectador.
Historia de un santo
Según la tradición, Sant Roc nació en Montpellier y murió en Voghera, Italia. Abandonó la casa de sus padres y fue de peregrinación a Roma sin embargo, al declararse una epidemia de peste se dedicó a curar a los enfermos.
Acabó contagiado y tuvo que aislarse a las afueras de la ciudad. Un perro le llevaba una barra de pan que hurtaba de la mesa de su amo y un ángel le curaba las heridas. Su devoción y su culto se extendió por toda Europa y ahora es el santo que tiene más capillas e iglesias dedicadas en todo el mundo.
En 1557 llegó a Gandia una epidemia de peste por lo que, autoridades se aclamaron a Sant Roc declarando festivo el 16 de agosto. Años después, le erigieron una ermita que se terminó de construir en 1587. Un año después, el duque Carlos de Borja y Castro manifestó el propósito de fundar en la ermita de San Roque un convento de franciscanos de la Reforma de san Pedro de Alcántara. Por eso, la presencia de Sant Francesc d'Assís junto al titular de la iglesia y del convento.