El Instituto Geográfico Nacional analiza la respuesta del suelo de Xàtiva ante posibles terremotos

Un equipo de la Red Sísmica Nacional ha llevado a cabo un análisis multicanal de ondas de superficie (MASW) en Xàtiva, utilizando los acelerómetros instalados en el Ayuntamiento. Este método permite obtener un perfil del suelo mediante el estudio de la propagación de ondas superficiales.

«El objetivo es conocer la composición del terreno donde están ubicados los sensores y determinar los parámetros necesarios para evaluar el impacto de posibles terremotos», explica Ángel Requena, director del Instituto Geográfico Nacional (IGN) en la Comunitat Valenciana.

Requena destaca que la intensidad con la que se perciben las ondas sísmicas en una ciudad depende directamente del tipo de suelo. «Según sus características, el terreno puede amplificar o atenuar un terremoto, influyendo así en su virulencia».

En esta intervención, los técnicos se centraron en el análisis del estrato más superficial del suelo, el que más afecta a la propagación de las ondas sísmicas en caso de seísmo. Para ello, generaron vibraciones controladas golpeando el terreno con un martillo en las inmediaciones del Ayuntamiento, justo donde se encuentran los sensores. Al registrar la velocidad y el tiempo de propagación de las ondas, se obtienen datos que permitirán caracterizar la zona y establecer protocolos de actuación ante un sismo.

Actualmente, el Ayuntamiento de Xàtiva cuenta con dos acelerógrafos: uno de alta precisión instalado en 2010 y otro más reciente, colocado en 2022, que aunque menos preciso, ofrece datos en tiempo real, lo que facilita una respuesta más rápida ante eventos sísmicos.

• Temas
• Terremotos
• Xátiva