Las leyes prometidas a Podemos se quedan a medias
De siete normas que Puig dijo a los morados que serían prioritarias tras adelantar elecciones se aprueban dos, se olvidan tres y el resto se atascan
burguera
Martes, 29 de diciembre 2020, 00:00
Octubre de 2018, con Podemos fuera del Consell pero apoyando desde Les Corts al PSPV y Compromís, socialistas y nacionalistas se comprometen con los morados a la aprobación prioritaria de siete leyes y la tramitación urgente de otras tantas a cambio de un acuerdo para los presupuestos de 2019. A cambio de conseguir un acuerdo para sacar adelante las cuentas «en tiempo y forma», tal y como siempre subrayan desde el Consell, se alcanza un acuerdo según el cual se trabajaría con ahínco para tramitar las leyes antes de que acabase la legislatura. Pero, sorpresa, Puig adelantó las elecciones y en vez de en mayo de 2019 se celebraron en marzo de ese año, un avance de los comicios para el que fue clave el apoyo de Podemos frente a la resistencia de Compromís, por lo que todas aquellas promesas de nuevas normativas quedaban aplazadas para la actual legislatura, buenas intenciones que se han quedado lejos de cumplirse.
Han pasado ya dos años y algunos meses desde aquellos compromisos firmados a tres bandas. Por prioritarias se entendieron siete leyes, de las cuales se han aprobado dos, otras dos han arrancado tímidamente y de las tres restantes se conoce muy poco de su paradero.
Quién sabe dónde está la ley de diputaciones, una norma con la que Podemos pretendía vaciar las instituciones provinciales y que se indicó el pasado verano que había intención de rescatar pero el rescate que pedía el Consell debió de ser muy alto y nadie lo ha querido pagar. Ni está ni se la espera. Sin noticias vive Les Corts respecto a la ley de expresidentes, una norma bloqueada en varias ocasiones pero que se mantuvo en la agenda de las prioridades como se conservan los trofeos infantiles, en los trasteros. De la del Consell Audiovisual tampoco se conocen detalles ni ninguna otra cosa.
Entre las sí tramitadas y aprobadas se sitúan la ley de la Sindicatura de Greuges y la de seguridad ferroviaria, mientras que en tramitación muy incipiente está todo lo relacionado con una nueva ley electoral, presentada por los grupos del Botánico pero aún pendiente de negociar con Ciudadanos, que sería proclive a aprobarla teóricamente, si bien el articulado que se presentó no gustó nada a los naranjas. Por su parte, la proposición de ley de Economía Circular está previsto que se presente mañana también tras sufrir varios parones, uno de ellos a última hora porque en el Consell decían no tener conocimiento del texto.
Al margen de esas leyes prioritarias, se quedaron pendientes de aprobar otras normativas, entre las que sí han visto la luz la ley del Juego así como la de Instituto Cartográfico. Queda por ver qué pasará con otras, que se consideraban también importantes pero que han recibido una atención residual. Es el caso de la ley de comarcalización, paralizada en hace ya más de tres años y respecto a la cual hay pocos avances.