'Everything Sucks!', adolescencia en tiempos de VHS

Alguien podría pensar que si lo de 'The End of the F***ing World' salió bien, ¿por qué no? Protagonistas adolescentes -unos disfuncionales, otros de postureo-, un título con un par de palabras mal sonantes y un argumento -aparentemente- gamberro. Así se intenta construir un argumento atrayente para la recién estrenada 'Everything Sucks!' ('Todo es una mierda') . No obstante, el resultado ya es tedioso y aburrido antes de finalizar el primer capítulo.

La gran baza son las referencias noventeras y esos guiños apelando a la nostalgia de una época que, ¿queremos recordar? Porque lo de los 80s y 'Stranger Things' está muy bien. Pero, ¿1996? No conformes, los más atrevidos han querido ver en esta fallida serie una nueva versión de 'Freaks and Geeks'. ¡Osados! La serie de Judd Apatow (se estrenó en 1999 aunque la trama se desarrollaba en 1981) supusa el salto al estrellato de actores como James Franco, Seth Rogen o Busy Phillipps. Humor 'real' en ojos de una generación que fue retratada a través de problemas que siguen estando de actualidad. Y, además, una estupenda ocasión para redefinir el concepto 'fashion'. En la que nos ocupa...¡Claro que salen VHS, Walkman, artilugios clásicos de la época...e incluso una 'vestimenta chándal' que si la recuerdas, probablemente la quieras olvidar! #perdonPorRecordarlo.

'Everything Sucks!' cuenta los ajetreos de un grupo de adolescentes a los que muchos les pondrían la etiqueta de 'raritos'. La acción transcurre en 1996 entre las (enfrentadas) clases de audiovisuales y de teatro de un instituto de un pueblo de Oregón. Haciendo gala de su edad, historias de amor no correspondido, los intentos por ser el chico/chica más popular, el descubrimiento de la sexualidad y demás.

No se puede decir que 'Everything Sucks!' se pierda en visiones poco realistas o edulcoradas -aunque sí ponen en boca de los personajes frases que no construiría sintácticamente un adulto con dos carreras universitarias-. Sin embargo, uno de los principales reproches, además de resultar aburrida, es que hace un ejercicio de memoria que ya no resulta novedoso: la televisión -y en esto las plataformas de vídeo bajo demanda han copiado descaradamente- parece que ha echado el ancla en el pasado como si otro tiempo pasado hubiese sido mejor. Los nuevos puristas llaman a todo esto 'coming-of-age'. Dicho de otra forma: ¡Hola, Chicas Gilmore!

Sí, el cartel del Sonorama 2018 anuncia a Liam Gallagher como estrella del Festival. No has leído mal. Pero hubo un tiempo, no tan lejano en que 'Oasis' inundaba todo. Y, como cuenta 'Everything Sucks!' parecía que la banda tenía una canción para cada estado de ánimo o, al menos, dos temas que era reinterpretables en todo tipo de avatares. Ellos son el (aplaudido) eje que vertebra la serie creada por Ben York Jones y Michael Mohan.

Kate Messner (Peyton Kennedy) los escucha a todas horas e intenta encontrar en sus letras los acordes que sirvan de banda sonora a su lucha con la sexualidad al tiempo que un bálsamo al hostigamiento homofóbico que sufre.

Y es que el hilo narrativo de los diez capítulos que componen la primera temporada no termina dejar despegar a la visión descarnada y sincera sobre lo que también pasaba (y pasa) en las aulas. Quizá porque...¡Todo es una mierda!

Los 10 capítulos que componen la primera temporada de 'Everything Sucks!' están disponibles en Netflix desde el 16 de febrero de 2018.

• Temas
• Netflix